Editorial Perfil comenzó la transformación de su matutino ideado bajo la influencia de la "yellow press" inglesa en un diario deportivo para competir con Olé, del Grupo Clarín.
Libre perdió la batalla en los kioskos de diarios, a pesar de haber llevado a la agenda temas que movieron el termómetro periodístico. Con bajísimas ventas y una derrota clara ante sus rivales Crónica, Popular e incluso Muy, Fontevecchia decidió transformar Libre, en un diario deportivo.“Confiando en la existencia de un público al que le interesa ‘el deporte por el deporte mismo’ más que las polémicas o escándalos que lo rodean, Editorial Perfil reconvierte su diario 'Libre' en un medio enteramente deportivo, que sale a la cancha este viernes para brindar todos los días la información, el análisis, la profundidad y el contexto histórico que hace rato esperás”, señaló la editorial.
La reconversión oculta el fracaso de un diario que, a pesar de instalar temas, no pudo tocar la sensibilidad popular, sobre todo en los últimos meses. El modelo de la prensa inglesa no conmovió a los sectores populares argentinos y en muchas ocasiones, los temas abordados, no eran los mismos que tenían en su agenda, Popular y Crónica, los líderes del segmento de diarios amarillos.
Un nuevo fracaso de Fontevecchia que se disfraza de diario deportivo. En realidad, el mayor fracaso de Fontevecchia no es editorial sino personal. El tipo se esmera por ser una persona, un ser humano y apenas alcanza a ser poco más que un sorete mal cagado.
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