La beba nació en una camioneta que quedó atrapada en la congestión vehícular luego de un múltiple choque en la autopista Dellepiane, donde murieron dos personas.
La mujer, que viajaba hacia el Hospital Argerich cuando quedó en medio del embotellamiento, dio a luz a la beba gracias a la asistencia de personal de bomberos de la Policía Federal y de Autopistas Urbanas (AUSA), minutos antes de las 13.
"Lo primero que se asomó fue un piecito, porque la beba venía dada vuelta; me tuve que arrodillar para poder rotarla cada vez que la mamá pujaba, hasta que pude sacar los dos piecitos, el tórax y al final la cabecita", dijo Gastón Quintana, el bombero que intervino en el parto.
Quintana, quien es padre de cuatro hijos, relató emocionado que "luego le di la beba enseguida a Mariana, que es mamá primeriza y tiene 18 años, para que la ponga en su pecho, mientras ella lloraba y nos agradecía".
El bombero de la policía federal, que horas antes había trabajado en el siniestro para sacar los cuerpos que habían quedado atrapados tras el choque, dijo que pasó "de un extremo a otro en segundos, de la muerte a este milagro".
"Había trabajado arduamente para sacar a las víctimas del impacto y después me tocó asistir en el parto. Trabajé como si fuera mi hijo el que estaba por nacer, la beba se llama Delfina Maite, está bien y es hermosa", expresó.
Quintana remarcó que todo el personal de Bomberos está capacitado para realizar estas labores, "gracias a los cursos de capacitación que nos dan constantemente".
"Lo primero que se hace en estos casos es contener a la persona y trabajar la respiración; este parto vino complicado, pero estamos capacitados para este tipo de intervenciones", subrayó.
La beba, llamada Delfina, junto a su madre fueron trasladadas al Hospital Piñero, donde ambas se encuentran en perfecto estado de salud.
Ivana, la empleada de Ausa que también ayudó en el parto, dijo a la prensa: "Imaginate lo que es ver morir a dos compañeros y poco tiempo después ver nacer una vida delante tuyo en el mismo lugar".
"No era día laborable para mí, pero vine y pasó todo esto. No dudé en asistir a la chica, aunque nadie nos dio indicaciones sobre cómo hacerlo. Simplemente saqué a la beba que venía de nalga, vi que estaba bien, le limpié la carita y me fui", detalló.
El hecho emocionó a los empleados de esa concesionaria de autopistas que horas antes tuvieron que lamentar la muerte de dos trabajadores de AUSA, cuando un camión chocó una camioneta utilitaria en la que viajaban las víctimas.
El choque múltiple se produjo cerca de las 10 a la altura del barrio porteño de Parque Avellaneda, cuando un camión, por motivos que se investigan, no alcanzó a frenar y chocó a los vehículos que aguardaban para pagar el peaje.
Como consecuencia del choque, los empleados de AUSA Claudio Kincaid y Roberto Savoretti murieron en el acto, mientras que otras 12 personas sufrieron heridas, informaron fuentes policiales.
AUSA confirmó por la tarde las identidades de los empleados fallecidos e informó en un comunicado que los otros dos compañeros que habían resultado afectados por el siniestro se encuentran fuera de peligro.
"El móvil en el que se hallaban los cuatro empleados de AUSA estaba detenido en la fila de peaje, esperando a traspasar la hilera de cabinas cuando, alrededor de las 10 de la mañana, un camión embistió a toda la hilera de vehículos detenidos. Entre ellos, el utilitario de la empresa", informó la concesionaria de la autopista.
El utilitario sufrió "destrucción total", debido a que quedó en el medio de la camioneta que lo impactó de atrás y de un camión que estaba adelante esperando a pagar el peaje, informó el titular del Same, Alberto Crescenti.
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