El secretario de Derechos Humanos de la Nación, Martín Fresneda, sostiene que esa política está amparada por un polémico Código de Faltas. "Es una política muy clasista, persigue criminalizar y estigmatiza a los sectores marginales", sostiene.
Hay un cambio de paradigma en materia de seguridad. Quienes adhieren al concepto democrático, sostienen que el diseño de la seguridad pública ha de ser confiado a organismos y funcionarios alejados de las corporaciones policiales.
El desafío es controlar la delincuencia con absoluto respeto por las garantías individuales. Poniendo especial cuidado en no generar marginalidad, a partir del destrato hacia sectores vulnerables de la población.
Terminar con el clientelismo policial sería la opción de máxima. En este contexto vanguardista, Córdoba se ubicaría en el período Precámbrico.
Para definir el escenario en el cual suceden los hechos de violencia que involucran a las fuerzas policiales cordobesas, nuestros amigos de Tiempo Argentino recurrieron al secretario de Derechos Humanos de la Nación, nacido en La Docta.
"Veo que, desde hace algún tiempo, la sociedad cordobesa, por una cuestión de valores políticos, ha policializado el sistema de seguridad –asegura Martín Fresneda–. Solamente cuenta con fuertes controles policiales. No se han logrado resolver los problemas de integración social. Si no se produce la integración, la única función que les queda es ejercer un fuerte control social de lo que,para ellos, son los sectores marginales".
En cuanto a la legislación que ampara este mecanismo policial, hay que decir que es de manufactura relativamente reciente. El Código de Faltas fue sancionado en 2003 por un Congreso con mayoría de Unión por Córdoba. "Es el marco normativo que rige en la provincia. Tiene un espíritu jurídico con una fuerte presencia policial en la vida cotidiana de las personas".
Una evaluación sobre la vigencia y legitimidad del controvertido código arroja los resultados esperados. "Figuras como el merodeo son obsoletas, son estigmatizantes, controlan a quien tiene un aspecto determinado: gorrita y moto para ellos es una conjunción explosiva".
De la Chota atrasa, pero lo peor es que junto con él, hace atrasar a Córdoba
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