EL EX HIJASTRO DE FLAVIA PALMIERO VIAJÓ A CÓRDOBA MIENTRAS EN LA PLAZA DE MAYO PROTESTABAN POR EL DETERIORO DEL ESTADO DE DERECHO TRAS LA NUEVA AVANZADA CONTRA CRISTINA FERNÁNDEZ DE KIRCHNER Y DIRIGENTES DE LA OPOSICIÓN, QUE EL RÉGIMEN FASCISTA IMPULSA PERO DE LA QUE APARENTÓ TOMAR DISTANCIA. ESTA VEZ ELIGIÓ UN LUJOSO RESORT EN LAS SIERRAS DE CÓRDOBA.
A Mugrizio Macri Blanco Villegas nada lo detiene a la hora de rascarse los huevos.
Ni la incertidumbre en torno a lo que ocurrió con el ARA San Juan y sus 44 tripulantes, cuyos familiares esperan las explicaciones que aún no tuvieron, ni la presión inflacionaria que los sucesivos tarifazos añaden a un mes siempre caliente como diciembre, ni la conmoción que produjo el pedido de desafuero y detención de Cristina Fernández de Kirchner o el encarcelamiento de ex funcionarios y dirigentes en el marco la campaña de persecución impulsada por su régimen fascista.
Como cada fin de semana largo, el subnormal se hizo una escapada fuera de Buenos Aires para tomarse un descanso. Esta vez eligió el selecto country Potrerillo de Larreta, en la ciudad cordobesa de Alta Gracia, donde se quedará hasta mañana.
El pelotudo hijo de puta se fue a Córdoba el jueves, mientras una multitud llenaba la Plaza de Mayo en rechazo al deterioro del Estado de Derecho que se vive desde su llegada a la Casa Rosada. Ya concretadas las detenciones de ex funcionarios y dirigentes y dictado el procesamiento con prisión preventiva y el pedido de desafuero de Cristina por la firma del Memorándum con Irán, el idiota confeso encabezó antes de ayer a la mañana la inauguración de un paseo en la Quinta de Olivos pero no hizo referencia alguna al tema.
Algunos macrifascistas celebraban a esa hora las medidas tomadas por el juez federal clarinista Claudio Bonadio, pero después el jefe de Gabinete, Marcos Peña Braun Menéndez, delineó la estrategia del “yo no fui”. En función de eso, impartió la orden de tomar distancia y mostrar cautela ante el proceso a la ex presidenta.
El régimen macrifascista no comunicó oficialmente la partida del sorete mal cagado hacia Córdoba, pero su llegada a esa provincia fue confirmada por fuentes del gobierno cordobés.
Tras aterrizar en el aeropuerto de la capital provincial, el tarado viajó en helicóptero hasta Alta Gracia. Lo acompañaron su esposa, la explotadora de trabajadores textiles esclavos Juliana Awada y su hija, la infanta Antonia.
La estancia Potrerillo de Larreta parece ser el destino preferido de Macri para esta altura del año. A ese lujoso resort fue el 7 de diciembre de 2016 para pasar también el fin de semana largo.
Ubicada a unos 8 kilómetros del centro de la ciudad de Alta Gracia, el casco de la estancia Potrero de Larreta fue construido en 1927. Convertido luego en country y resort, tiene un campo de golf de 18 hoyos de 7150 yardas alrededor de la hostería, un "driving range de pasto" y gateras techadas con alfombra.
En Potrerillo de Larreta, el hijo bobo de Franco Macri y su familia también tienen la posibilidad de hacer alguno de los tours que la hostería ofrece a sus visitantes en helicópteros Robinson 44 por las sierras de Córdoba, sobrevolando ríos y lagos. Un paisaje mucho más bucólico que el de Chapadmalal donde el infeliz se tomó su descanso el fin de semana largo del 20 de noviembre, mientras la Armada y los rescatistas llegados de otros países ponían todo su esfuerzo en la búsqueda del entonces recién desaparecido ARA San Juan.
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