Temeroso de las repercusiones de una causa judicial en su contra, iniciada por la Secretaría de Comercio, el FMI cierra sus oficinas en Buenos Aires y atenderá desde Lima, Perú.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) cerrará su oficina en Buenos Aires a fines de este mes, en protesta contra la causa judicial iniciada por el secretario de Comercio, Guillermo Moreno, para que explique cómo construye su propio índice de inflación.
Tras la presentación de Moreno en 2011, el juez Alejandro Catania le pidió al Fondo que explique cómo construía sus estadísticas, lo cual fue rechazado por ese organismo alegando inmunidad diplomática.
Si bien el FMI fue tajante con la respuesta, en su oficina porteña quedó instalado el temor a una eventual citación o detención de alguno de sus funcionarios, por lo que buscará evitarlo con el levantamiento de las instalaciones.
El cierre de la oficina será concretado a fines de marzo y el organismo anunció que manejará la relación formal con el gobierno argentino a través del representante que posee en Perú, Kevin Ross.
No lo vamos a extrañar. Ni un poquito siquiera.
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