Los soldados opositores que no renuevan sus bancas o que están a un paso de perderlas si repiten la baja performance. ¿Dónde aterrizarán después de octubre?
Las elecciones primarias complicaron el panorama actual opositor. Mientras el oficialismo se consagro como la fuerza que llegó para quedarse (obtuvo 50,21 porciento de los votos), el duhaldismo, la UCR y el socialismo vieron complicado su pelea por el sillón de Rivadavia, sin embargo la peor parte se la llevó la Coalición Cínica ya que el 3,24 % obtenido dejo al partido a un paso del desmembramiento.
Así las cosas existe una larga lista de legisladores, autores muchos ellos de operaciones políticas y periodísticas contra el gobierno nacional, que podría quedarse sin trabajo.
Por estas horas hay dos legisladoras que no renovarán su banca y que están escuchando ofertas. Una de ellas es la diputada del bloque unipersonal Cynthia Hotton, allegada al vicepresidente okupa, Julio Cobos, quien intentó presentarse con una lista propia en las elecciones porteñas. Hotton, de familia diplomática y buena formación, no quiere volver a trabajar a la Cancillería, por lo que comenzó a sondear la posibilidad de conseguir apoyo para llegar a la Defensoría del Pueblo de la Nación. La otra opción que baraja es que Horacio Rodríguez Larrata (jefe de gabinete porteño) la convoque para el Ejecutivo de la Ciudad y así blanquear su pase definitivo al PRO.
La otra es la radical Silvana Giudici. La ex candidata a la jefatura de gobierno porteña (obtuvo menos del 3 porciento) viene coqueteando con todo el arco opositor. En las últimas semanas se la vio envuelta en un enredo de desmentidas, luego de mostrarse muy contenta en una cena con los macristas Paula Bertol, Federico Pinedo y Gabriela Michetti; cenadela que también partició Patricia Bullrich Luro Pueyrredón. Tras negarlo fervientemente, la radical también podría recalar en el Gobierno de Mugricio Macri, como extrapartidaria, aunque por el momento la posibilidad más firme es que llegue al directorio de la Autoridad Federal de Servicios de Comunicación Audiovisual (AFSCA).
En la otra carilla de la lista se encuentran los lilitos, aquellos que no integran la nómina de legisladores o que pese a formar parte de ellas podrían perder su banca por no lograr el mínimo necesario. Uno de ellos es el candidato a vicepresidente de Elisa Carrió, Adrián Pérez quien perderá su lugar como diputado en octubre. El lilito, quien se encuentra enemistado con Bullrich Luro Pueyrredón, estaría pensando en migrar a la Unión Cívica Radical aunque "la piba" lo había acusado de estar en tratativas con Hermes Binner.
Algo similar haría la diputada Fernanda Reyes, quien tampoco tiene posibilidades de revalidar su banca. En ambos casos (tanto en Reyes como en Peréz) el puente es el diputado de la UCR Ricardo Gil Lavedra. En otra parte de la nómina de los marginados de octubre, se encuentra el diputado de la Coalición Cínica, Fernando Iglesias, quien tendría un descenlace diferente al de sus pares de la CC. El legislador, que tampoco podrá renovar su banca, está al borde de abandonar su carrera política. Iglesias volvería a su profesión de periodista y ya habría intendado comunicarse con Daniel Hadad para tener un lugar en su multimedio.
En el peor de los casos, todos ellos, podrían pedirle a su empleador, Héctor Magnetto, un cambio de destino y así pasar del Congreso a la redacción de Clarín o a los estudios de TN.
Por estas horas hay dos legisladoras que no renovarán su banca y que están escuchando ofertas. Una de ellas es la diputada del bloque unipersonal Cynthia Hotton, allegada al vicepresidente okupa, Julio Cobos, quien intentó presentarse con una lista propia en las elecciones porteñas. Hotton, de familia diplomática y buena formación, no quiere volver a trabajar a la Cancillería, por lo que comenzó a sondear la posibilidad de conseguir apoyo para llegar a la Defensoría del Pueblo de la Nación. La otra opción que baraja es que Horacio Rodríguez Larrata (jefe de gabinete porteño) la convoque para el Ejecutivo de la Ciudad y así blanquear su pase definitivo al PRO.
La otra es la radical Silvana Giudici. La ex candidata a la jefatura de gobierno porteña (obtuvo menos del 3 porciento) viene coqueteando con todo el arco opositor. En las últimas semanas se la vio envuelta en un enredo de desmentidas, luego de mostrarse muy contenta en una cena con los macristas Paula Bertol, Federico Pinedo y Gabriela Michetti; cenadela que también partició Patricia Bullrich Luro Pueyrredón. Tras negarlo fervientemente, la radical también podría recalar en el Gobierno de Mugricio Macri, como extrapartidaria, aunque por el momento la posibilidad más firme es que llegue al directorio de la Autoridad Federal de Servicios de Comunicación Audiovisual (AFSCA).
En la otra carilla de la lista se encuentran los lilitos, aquellos que no integran la nómina de legisladores o que pese a formar parte de ellas podrían perder su banca por no lograr el mínimo necesario. Uno de ellos es el candidato a vicepresidente de Elisa Carrió, Adrián Pérez quien perderá su lugar como diputado en octubre. El lilito, quien se encuentra enemistado con Bullrich Luro Pueyrredón, estaría pensando en migrar a la Unión Cívica Radical aunque "la piba" lo había acusado de estar en tratativas con Hermes Binner.
Algo similar haría la diputada Fernanda Reyes, quien tampoco tiene posibilidades de revalidar su banca. En ambos casos (tanto en Reyes como en Peréz) el puente es el diputado de la UCR Ricardo Gil Lavedra. En otra parte de la nómina de los marginados de octubre, se encuentra el diputado de la Coalición Cínica, Fernando Iglesias, quien tendría un descenlace diferente al de sus pares de la CC. El legislador, que tampoco podrá renovar su banca, está al borde de abandonar su carrera política. Iglesias volvería a su profesión de periodista y ya habría intendado comunicarse con Daniel Hadad para tener un lugar en su multimedio.
En el peor de los casos, todos ellos, podrían pedirle a su empleador, Héctor Magnetto, un cambio de destino y así pasar del Congreso a la redacción de Clarín o a los estudios de TN.
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