Luego de conocer la estrepitosa derrota de la UCR en la Ciudad se cuelga de Mauricio Macri. Sobre este tema quiso aclarar que él nunca habló de "límites"... salvo para agredir al gobierno.
El pre candidato presidencial de la UCR, Ricardito Alfonsín, habló ayer en una entrevista radial sobre su sorpresivo apoyo a la candidatura del hijo bobo de Franco Macri, de cara al ballotage entre el PRO y el postulante del Frente para la Victoria, Daniel Filmus, previsto para el 31 de julio en la Ciudad de Buenos Aires. En un desayuno de trabajo organizado por la Asociación Argentina de Logística Empresaria intentó justificar esta decisión.
"Recorremos ciudades y nos dicen: a mi me gustaría votar a un candidato que no es del gobierno nacional pero tenemos miedo que no los dejen hacer nada. Eso cuarta la libertad de los ciudadanos. El porteño en ese sentido se manifestó con dignidad republicana y le puso un limite (al gobierno nacional)", respondió sobre el resultado de los comicios porteños.
Sin embargo tan solo segundos después Alfonsinito caería en una contradicción. Cuando el notero le preguntó acerca de su polémica frase emitida meses atrás, en el marco de las alianzas, sobre que su límite era Macri, insólitamente respondió: "Nunca utilizo la palabra límite porque me parece agresiva. Yo no puedo sumar a otra fuerza política ahora". El radical se olvidó que segundos antes había dicho que el electorado porteño "le puso un limite" al gobierno nacional.
Este vire hacia la derecha del hijo bobo de Raúl Alfonsín y por ende este acercamiento hacia el PRO, esta enmarcado, primero, en el acuerdo bonaerense con Francisco De Narcováez, ex aliado de Macri en la provincia de Buenos Aires, que lo alejó definitivamente del socialismo de Hermes Binner y el GEN de Margarita Stolbizer y segundo, en las declaraciones que el Colorado propinó al actual jefe de Gobierno porteño luego de conocer las cifras oficiales en primera vuelta. “Esto muestra que no hay una ola cristinista” había dicho eufórico el integrante de Unión por el Desarrollo Social (UDeSo).
Somos reiterativos. Lo sabemos y pedimos disculpas por ello. Pero nos resulta inevitable, cada vez que abre la boca este impresentable, pensar en su padre, Raúl Alfonsín. A esta altura, no queda más remedio que acuñar la frase "vergüenza post mortem".
No hay comentarios:
Publicar un comentario