lunes, 8 de diciembre de 2014

Carrió es la precandidata con mayor imagen negativa nacional

Según una encuesta, la desquiciada diputada de la Coalición Cínica es una de las dirigentes con más alto nivel de conocimiento en el electorado pero suma un 52,2 por ciento de percepción adversa entre los votantes.


Elisa "Biblita" Carrió tuvo una parábola singular en las últimas dos elecciones. En 2011, cuando se presentó a la presidencia, sacó el 2% de los votos a nivel nacional. Dos años después, en las parlamentarias 2013, Lilita resurgió como el Ave Fénix, en el distrito en el que conserva su principal caudal electoral, la Ciudad de Buenos Aires. Se alzó con el 32% de los sufragios en la categoría de diputados, quedando a sólo dos puntos del PRO, que ganó en el distrito. 

Esta recuperación pareciera quedar circunscripta al particular electorado capitalino y no trasladarse a la imagen de la diputada. Su hábito de eterna ruptura, que en las últimas semanas volvió con su renuncia a la coalición política que ella misma había ayudado a fundar meses atrás, el FAUNEN, parece tener sus costos. Cabe recordar que Lilita reiteró con el FAUNEN el modus operandi que había tenido con el Acuerdo Cívico y Social, en 2009, y antes, con la Coalición Cínica-ARI. Trabajó para hilvanar un frente con varias fuerzas y poco después de las elecciones lo dinamitó.

Toda esta introducción es para ir al punto: en la última encuesta de la consultora Ricardo Rouvier y Asociados, en la que entre otras cosas se midió imagen de varios dirigentes políticos a nivel nacional, Carrió logró un primer puesto que no es para envidiar. Obtuvo el mayor nivel de imagen negativa entre los dirigentes que aparecieron en la encuesta. Tiene 52,2% de percepción adversa contra un 37 a favor y un 10 que no se pronunció. A modo de comparación, Daniel Scioli obtuvo 64,7 de imagen positiva contra un 23,8 de negativa; Mugrizio Macri un 56,1 a favor y un 35 en contra; y el diputado radical Ricardito Alfonsinito, uno de los ex aliados de Carrió, 54,1 de percepción favorable y 34,7 en contra. Nada es gratis.

La propia Carrió parece tener claro que, de presentar una candidatura presidencial, su performance podría volver al histórico 2% que logró en 2011. Acaso por eso, sus últimos movimientos la muestran más cerca del rol de armadora política (o desarmadora, según el punto de vista desde el que se evalúe) que trajinando calles en una campaña con final cantado. 

El dato clave que le juega en contra a la desequilibrada mental, que la semana pasada se fotografió divertida con Gabriela Michetti y Mugrizioo Macri alimentando la idea de un acuerdo con el PRO, es la relación entre su imagen negativa y el alto nivel de conocimiento que logra en el electorado. Entre los encuestadores circula una máxima según la cual aquel dirigente que es conocido por casi todos los votantes y reúne una percepción negativa por encima del 50% está en las peores condiciones para disputar una elección, sobre todo si se trata de una presidencial. 

En el caso de "Biblita", el "no sabe, no contesta" que suele incluir, entre otras cuestiones, el nivel de desconocimiento del votante sobre el candidato, suma sólo un 10,7%. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario