Le paso a un niño al comer la golosina que le había regalado su abuelo. La empresa lo acusa de mentiroso y el hombre pide un millón de dólares de indemnización.
Un abuelo chileno quiso tener un buen gesto con su nieto al comprarle una barra de chocolate cuando se dio cuenta que el niño se estaba ahogando con un preservativo que se encontraba dentro de la golosina.Según afirmó Eduardo Sepúlveda (abuelo del pequeño), el nene comenzó a asfixiarse mientras comía un famoso bizcochuelo empaquetado y con asombro lo ayudó para luego descubrir que en su interior había un preservativo.
El profiláctico fue entregado a la Seremi de Salud, donde se realizarán los análisis respectivos para determinar a qué corresponde el condón de unos 10 centímetros que se localizó en el chocolate.
El hombre realizó la denuncia y pide un millón de dólares de indemnización. "Para que la empresa reciba una sanción ejemplar, mi nieto pudo haber muerto", dijo a la agencia de noticias Alfa Chile.
La empresa Costa, que produce el Chocman, negó totalmente la información en un comunicado donde trató al hombre de mitómano y mencionó que “ante versiones de prensa que aseguran que un producto Chocman contendría un profiláctico en su interior, es nuestro deber aseverar que dicha información es absoluta y completamente falsa”, y agrega: “Lamentamos que se difunda una noticia alarmista e infundada por los medios y las redes sociales sin consultar la versión de la compañía frente a estos hechos”.
Según explican los de Costa, “esta denuncia corresponde a un consumidor que ha intentado en reiteradas ocasiones obtener compensaciones millonarias por parte de la empresa, anunciando un escándalo público para obtener lo que exige”.
El comunicado afirma incluso que “el consumidor ha reconocido ante la empresa que él sabe que no se trata de un profiláctico, pero que prefiere llamarlo así, porque él -en su calidad de periodista- reconoce que será más atractivo comunicacionalmente”.
La compañía agrega que se reserva la posibilidad de iniciar "las acciones legales contra todos aquellos que, infundadamente, pretenden enlodar el nombre de la compañía y obtener ilegítimamente un beneficio económico improcedente”.
Lo único que le falta al mufa del presidente chileno (no lo nombramos por las dudas), era que se le muriera un pibe por lastrarse un condón.
Currín On Line buscó la opinión de un experto en la fabricación de chocolates. Fue así como Ricardo Fort, de la firma Felfort, señaló que "en Argentina, es este sentido, estamos más avanzados. Aquí, los forros no venimos adentro de los chocolates. Los fabricamos".
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