El dirigente de las patronales agropecuarias convocó a sabotear la economía argentina sin importar las consecuencias para sus compatriotas. Los privilegios de un sector que puede cerrar su negocio y subsistir.
Eduardo Buzzi intentó mostrarse como líder de la dirigencia progresista dentro de las patronales agropecuarias, sin embargo, su alianza con la Sociedad Rural Argentina y sus operaciones políticas evidencian todo lo contrario.
En conversación con FM Latina, Buzzi disparó: "No vamos a vender soja. Que se acumulen 100 barcos en el puerto y vamos a ver como le va a la economia".
Así, Buzzi evidenció que las patronales agropecuarias sólo buscan destruir la economía, afectar a toda la población y priorizar los posicionamientos y objetivos políticos por sobre los argentinos.
Al mismo tiempo, se evidencian los amplios márgenes de ganancia que han gozado y les permiten frenar la comercialización de granos, es decir, cerrar su negocio y continuar subsistiendo.
Los sectores populares y las clases medias no pueden darse el lujo de cerras sus comercios ni dejar de trabajar, lo que evidencia el lugar de poder que ocupan las patronales agropecuarias y su objetivo real; destruir la economía argentina como ya lo han impulsado en otros tiempos a través de golpes de Estado.
El agroterrorista también se encargó de ningunear al ministro de Agricultura, Norberto Yahuar, a quien tildó de "ilustre desconocido".
"Evaluamos no vender la cosecha de soja a partir de marzo", agregó Buzzi, que evidenció los verdaderos objetivos sectoriales; desestabilizar al gobierno que lidera Cristina Fernández de Kirchner en un año electoral, através del boicot a la economía y a costa del sufrimiento del pueblo argentino.
Nos preguntamos si el delito de traición a la Patria sigue vigente en nuestro Código Penal.
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