El PRO recurre al marketing antes que a la política; sus candidatos están construídos sobre estrategias publicitarias y técnicas de comunicación. Sin embargo, puede fallar: la campaña actual es una copia de otra realizada en Portugal.
La nueva campaña del PRO fue lanzada con entusiasmo por sus funcionarios en las redes sociales al mismo tiempo que se empapelaba la ciudad con triángulos de colores y la frase "vos sos bienvenido".
La nueva campaña del PRO fue lanzada con entusiasmo por sus funcionarios en las redes sociales al mismo tiempo que se empapelaba la ciudad con triángulos de colores y la frase "vos sos bienvenido".Los macristas se entusiasmaban en twitter: "la diversidad de colores representa la pluralidad de ideas", decían.
Pero en tiempos de redes sociales e internet, los plagios duran muy poco antes de ser descubiertos. La campaña del PRO es una copia idéntica de otra realizada en Portugal con fines solidarios.
La campaña original puede verse haciendo click aquí.
Al parecer los cambios son mínimos, como la inclusión del clásico amarillo PRO como color predominante, en lugar del verde.
Así se hizo la campaña del PRO; se copió.
Lo peor es que le cobran para "idear" esas campañas. No, no. Perdón. Lo peor es que le importa tres carajos que le cobren, porque total lo pagamos nosotros, los porteños. No, no. Perdón. Lo peor es que cuando uno está casi convencido que el hijo bobo de Franco Macri ya no tiene más cagadas por hacer, él siempre saca una cagada nueva de la galera.
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