EL CAMARISTA PORTEÑO, A QUIEN LOS OFICIALISTAS NO CONSIGUIERON ESTA SEMANA INICIARLE EL JUICIO POLÍTICO, DIJO QUE SE PRETENDE QUE "NO EXISTA UN PODER JUDICIAL INDEPENDIENTE, SINO JUECES QUE DEFIENDAN" A LA ADMINISTRACIÓN MACRIFASCISTA. ADVIRTIÓ SOBRE EL ROL QUE JUEGAN LOS MEDIOS Y LOS MAGISTRADOS INDENTIFICADOS CON EL OFICIALISMO.
El juez de la Cámara Federal porteña Eduardo Freiler advirtió que el régimen fascista quiere convertir al Consejo de la Magistratura en un comisariado político" y los medios alineados con el oficialismo son partícipes de la maniobra tendiente a apartarlo de su cargo. “Son los que dan a la ciudadanía la sensación de verdad de lo que ellos pretenden", señaló el magistrado, quien también apuntó que un sector del Poder Judicial forma parte del “entramado político” encabezado por Mugrizio Macri
Freiler está en la mira del oficialismo, que lo considera un juez afín al kirchnerismo y quiere desplazarlo. Por ello lo acusa de “mal desempeño” y de “enriquecimiento ilícito”.
En su arremetida contra el camarista, los oficialistas consiguieron en lunes pasado aprobar en la Comisión de Disciplina del Consejo de la Magistratura el dictamen acusatorio, pero el rechazo del representante de los académicos, Jorge Candis, en esa instancia anticipó que no tendrían los votos suficientes en el pleno del cuerpo para avanzar con el juicio político en su contra. Ante ese escenario, ante la certeza de que si sometía lo sometía a votación no lograría su cometido y el dictamen sería archivado, el oficialismo optó el jueves por postergar sin fecha su tratamiento.
Además de señalar que el objetivo del oficialismo es “convertir al Consejo de la Magistratura en un comisariado político”, Freiler dijo ayer a la mañana, en declaraciones radiales, que “hay una parte del Poder Judicial identificada con el Gobierno” que pretende su juicio político. "Creo que la participación de muchos jueces en un entramado político es notoria", remarcó el camarista.
Freiler también habló del rol de los medios en ese entramado. "Hay algunos periodistas que dicen: quiero a alguien preso, no importa quién", citó a modo de ejemplo y explicó que el papel de la prensa alineada con Macri es dar “la sensación de verdad de lo que ellos pretenden”. Asimismo, señaló que "es el camino más fácil y asegurado: el de los grandes medios, donde se repiten hasta el hartazgo las denuncias".
Horas después del fracaso del oficialismo de avanzar contra Freiler y ante la imposibilidad de manejar como pretende la investigación de las coimas pagadas por Odebrecht, Macri dijo el jueves que “los jueces tienen que saber que buscamos la verdad o buscaremos otros jueces”.
"La frase de Macri es de tremenda gravedad institucional", analizó el camarista, y añadió que "esto habla del interés de que no exista un Poder Judicial independiente, sino jueces que defiendan al Gobierno".
“Tonelli dijo que no tenía que quedar ningún juez peronista ni mucho menos kirchnerista", recordó también Freiler para dar cuenta de cuál es el propósito del oficialismo. Pablo Tonelli es el macrifascista que lleva la batuta en su contra en el Consejo de la Magistratura, donde ocupó el lugar que le correspondía al Frente para la Victoria.
La excusa con la cual el oficialismo suspendió la votación sobre el dictamen acusatorio contra Freiler fue que "ingresaron tres denuncias nuevas" que convenía analizar antes de tomar una decisión. Lo cierto es que la decisión de avanzar contra Freiler está tomada y la intención de los oficialistas es ganar tiempo con la expectativa de que el recambio en el Consejo de la Magistratura les juegue a favor y les permita concretar su arremetida.
Tonelli lo dejó claro ayer, en declaraciones a la ultra oficialista radio Mitre. "Por más que por el momento no podamos reunir los votos para proceder al juzgamiento y a la suspensión de Freiler, no vamos a cejar en el intento, no vamos a flaquear. Estamos convencidos de que tiene que ser juzgado”, afirmó y se mostró esperanzado de que “en algún momento, más tarde o más temprano” podrán hacerlo.
Freiler no les dará el gusto de dejar la Cámara Federal porteña. "No hay posibilidad de que yo renuncie. Es una cuestión de dignidad. No les puedo dar el gusto a ellos de renunciar. "Si yo me voy les estaría dando el gusto a sus pretensiones antidemocráticas", afirmó.
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