El Grupo Clarín, que prohíbe la actividad sindical, demonizó al trabajador Armando Domínguez, que se manifestó contra los cortes de ruta de los ambientalistas que se oponen a la minería. Los argumentos del multimedio es que se trata de un delegado sindical por lo tanto "no es un trabajador más".
En la conferencia de prensa en la cual la presidenta Cristina Fernández de Kirchner anunció inversiones en una nueva fábrica cementera de Olavarría, mantuvo un diálogo con Armando Domínguez un trabajador de la nueva fábrica.
Domínguez además de agradecer a Cristina por la inauguración se opuso a los cortes de ruta de los ambientalistas.
El Grupo Clarín, a través de Canal 13, intenta deslegitimar a Domínguez diciendo que no es un trabajador más, sino un dirigente político.
La verdad es que Armando Domínguez es un trabajador que concurre a diario a cumplir con sus tareas y además de eso fue electo por sus compañeros como delegado gremial.
Suponer que un delegado gremial deja de ser un trabajador es el modo en que el Grupo Clarín entiende la representación sindical y por ello en esa empresa prohíbe la actividad gremial.
Armando Rodríguez expresó su opinión como trabajador en diálogo con la Presidenta por que no es leal a las patronales sino a los intereses de sus representados.
Suponemos que para Magnetto, él mismo no es un hijo de puta; así que de ahí para abajo se puede esperar cualquier cosa.
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