"Maté a 255 personas y no me arrepiento"

Así lo asegura el francotirador estadounidense, Chris Kyle. La historia de un asesino oficial.

"La leyenda", "el exterminador" y "el diablo Ramadi" son sólo algunos de los apodos por que que se lo conoce. El francotirador estadounidense Chris Kyle reconoció que pese a haber matado a 255 personas en combate, no se arrepiente.

Según publicó ayer la BBC Mundo, entre 1999 y 2009, el entonces oficial del pelotón Charly, tercer grupo de la fuerza de élite estadounidense conocida como Navy SEALs, se ganó la reputación de ser el francotirador más letal en toda la historia del grupo.

Oficialmente se le adjudican 150 víctimas, una cifra que supera el récord anterior, de 109, alcanzado por un francotirador durante la Guerra de Vietnam; pero Kyle afirma que el número es mayor. Sólo en su segunda batalla en Fallujah, a finales de 2004, dice haber dado muerte a 40 enemigos.

Su relato se conoció a través de un libro publicado recientemente en EE.UU. por la editorial Harper Collins llamado "American Sniper". Allí Kyle relata con lujo de detalles el trabajo que desempeñó como combatiente en Irak. "Me gustó lo que hice. Todavía me gusta. Si las circunstancias fuesen diferentes -si mi familia no me necesitase- volvería en un abrir y cerrar de ojos", escribe.

"El número no es importante para mí. Me hubiese gustado haber matado más gente. No para presumir, sino porque creo que el mundo es un lugar mejor sin salvajes que atenten contra la vida de estadounidenses", asegura.

Aclaremos algo: este soldado mata de lejos. Es un francotirador (sniper). Alcanza a verle la cara a sus víctimas a través de una mira. No lo salpica su sangre.

Tampoco se encuentra solo en medio del enemigo. Está protegido por el ejercito mas importante del mundo con la mejor tecnología. 

Es decir que, además de ser un enfermo por matar fríamente, seguramente es un gran cagón que no se atrevería a enfrentarse a ninguna de sus víctimas frente a frente y mano a mano porque mas de uno lo dejaría embarazado poco antes de cortarle el cuello.

Guapos eran los de antes. Este es solo un vulgar asesino y cagón. (*)

(*) La conclusión contenida en los últimos cuatro párrafos, pertenece a "Pascalito", quien dejó ese comentario cuando esta misma nota fue publicada por DiarioRegistrado.com.