El candidato a presidente, Alberto Rodríguez Saá, se desligó de los magros números que Alfonsinito tiene en las encuestas: "La crisis el radicalismo no me la pasen a mí", señaló.
El derrotero de Alfonsinito en la campaña electoral ha ido de mal en peor. Su pobre resultado en las primarias y el posterior desplante de Francisco De Narcováez, su principal aliado, dejaron al chascomunense en la peor posición.
Ahora, el nuevo aliado del narcolorado De Narcováez, Alberto Rodríguez Saá, trata de desligarse del visible descenso de Alfonsinito en las encuestas: "Yo no me meto, es un problema que resolverá la gente a quién vota. No tengo nada que ver. La crisis del radicalismo no me la pasen a mí", disparó el puntano.
"Yo no tengo candidato a gobernador y estoy eligiendo uno para tener una actitud positiva frente a la provincia de Buenos Aires y frente al país. Entonces, la actitud positiva no me la conviertan en negativa de que yo tengo la culpa de que el radicalismo está en crisis", agregó el gobernador de San Luis.
"Respeto mucho al doctor Alfonsín, pero los candidatos están haciendo la plancha", finalizó.
Así, el hijo bobo del ex presidente vive sus peores momentos en la política. El descenso en la intención de voto lo deja al borde de una de las peores performances de la UCR, incluso después de la efímera popularidad de Julio Cleto Cobos.
No coincidimos con rodríguez Saá en cuanto a que el radicalismo eté en crisis. El radicalismo no está en crisis. Está extinguido.
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