Clarín y La Nación tienden puentes para unificar a la oposición

Aunque las diferencias entre algunos sectores de la oposición son irreconciliables, los medios hegemónicos buscan acercar a los principales actores; la UCR y el PJ Residual, la UCR y el socialismo, el PJ Residual y el PRO. Todo vale para vencer al kirchnerismo.

La oposición no da señales claras. Está dispersa y atomizada. Sus principales candidatos no estimulan al electorado y no pueden socavar la intención de voto de la presidenta.

Por propia incapacidad y por evidentes diferencias políticas, la oposición navega en el desconcierto electoral. En ese clima de incertidumbre y debilitamiento político, los medios opositores se encargan del armado político al construir puentes entre candidatos.

La Nazión publicó el domingo pasado una entrevista a Ricardo Alfonsín, en la que el candidato de la UCR se muestra abierto a cerrar filas con ciertos personajes del Peronismo Residual. Sin embargo, días atras el propio Alfonsín había negado esta posibilidad.

Dice Alfonsín en La Nazión: "El Peronismo Federal es una fuerza muy heterogénea, pero si hay dirigentes que quieren sumarse a nuestro frente, a nivel nacional o distrital, abriremos una instancia de diálogo para ver si tenemos coincidencias programáticas".

Así, a través del pasquín mitrista, Alfonsín le abre la puerta a las alianzas y les manda un mensaje a los otros integrantes de la oposición.

Tan visible es la desesperación, que Alfonsín no descarta a figuras como De Narváez, exponente típico de la derecha dura y ex aliado del PRO, y el socialismo santafesino, ideológicamente lejos del Peronismo Residual.

Clarín, el diario envuelve huevos, por su parte, hace su trabajo, similar al de La Nazión: "Macri, claro, no está solo. Su futuro parece ligado a la evolución del Peronismo Federal, sumido ahora en desconcierto. Al jefe porteño le importa Eduardo Duhalde. En su cabeza figura el entramado para una posible coalición que enfrente a Cristina en octubre. Algunas balas están empezando a picar cerca del ex presidente. Hubo una constancia el fin de semana que pasó".

Ante la incapacidad de la oposición de generar una alternativa tentadora para la sociedad, los medios son los que intentan armar los puentes entre los dispersos candidatos.

No importa nada más que ganarle al kirchnerismo en octubre; no importa si la alianza sume a personajes ideológicamente opuestos. Nada importa; todo vale a la hora de hacerse con el poder, incluso si hay que armar una coalición con representantes de la derecha dura y el socialismo, articulados e impulsados por los medios de comunicación hegemónicos.

La desesperación de los pasquines opositores llega a tal punto, que se está analizando seriamente la posibilidad de presentar una nueva fórmula para hacer frente al kirchnerismo en las próximas elecciones: Magnetto - Saguier.