Las promesas de campaña de Macri se ahogan cada vez que llueve en la ciudad. Antes de asumir, prometió que Buenos Aires no se inundaría más; sin embargo, la situación es cada vez peor.
Belgrano, Palermo, las avenidas Juan B. Justo, Libertador, Dorrego y varias calles más volvieron a sufrir complicadas inundaciones tras una fuerte lluvia en la madrugada del domingo. Los "caballitos de batalla" de Macri en su campaña fueron la seguridad, los 10 kilómetros de subte (jamás realizados), y la solución al tema de las inundaciones. Sin embargo, lluvia tras lluvia, sus promesas se diluyen en el agua que azota a los porteños.
Aunque en esta ocasión y por la hora de la tormenta los grandes medios no cubrieron el desastre en que se convirtió la Ciudad tras la lluvia de la madrugada del domingo, lo cierto es que Buenos Aires volvió a colapsar.
Autos flotando por la calle Blanco Encalada; Juan B. Justo convertida en un río; Libertador devenida en un lago artificial y cientos de calles cubiertas por agua fueron el resultado de la desidia del Gobierno porteño.
Si bien Macri se la pasa destacando una "megaobra" que se realiza para desagotar la Ciudad, la realidad indica que no sólo la situación no mejoró, sino que en algunos lugares empeoró.
La calle Blanco Encalada había dejado de convertirse en un río cada vez que llovía, sin embargo, en ésta ocasión, al igual que en la última gran tormenta, la calle que cruza Cabildo en el barrio de Belgrano volvió a ser un escenario repleto de coches flotantes e incluso volquetes nadadores.
En avenida del Libertador los coches que provenían de la Provincia de Buenos Aires debían subir a la General Paz ya que, a 20 metros del ingreso a Capital, el asfalto se convertía en un lago artificial. A los costados, varios automovilistas llamaban a sus servicios de auxilio para socorrer sus vehículos que habían quedado varados y afectados por el agua.
Sin embargo, la nota del día la dio Flavia Palmiero, ex mujer de Franco Macri -y por lo tanto ex madrastra de Mauricio-, quien pidió auxilio vía Twitter, porque su casa se innudaba. La tuitósfera respondió con bromas al desesperado pedido de auxilio de la ex conductora de "La ola verde".
Lo cierto es que las promesas de campaña de Macri están lejos de cumplirse, Buenos Aires se inunda con mayor frecuncia y las obras que el Gobierno Porteño lleva adelante no sólo no se finalizaron, si no que además tienen graves denuncias en su contra.
Aunque en esta ocasión y por la hora de la tormenta los grandes medios no cubrieron el desastre en que se convirtió la Ciudad tras la lluvia de la madrugada del domingo, lo cierto es que Buenos Aires volvió a colapsar.
Autos flotando por la calle Blanco Encalada; Juan B. Justo convertida en un río; Libertador devenida en un lago artificial y cientos de calles cubiertas por agua fueron el resultado de la desidia del Gobierno porteño.
Si bien Macri se la pasa destacando una "megaobra" que se realiza para desagotar la Ciudad, la realidad indica que no sólo la situación no mejoró, sino que en algunos lugares empeoró.
La calle Blanco Encalada había dejado de convertirse en un río cada vez que llovía, sin embargo, en ésta ocasión, al igual que en la última gran tormenta, la calle que cruza Cabildo en el barrio de Belgrano volvió a ser un escenario repleto de coches flotantes e incluso volquetes nadadores.
En avenida del Libertador los coches que provenían de la Provincia de Buenos Aires debían subir a la General Paz ya que, a 20 metros del ingreso a Capital, el asfalto se convertía en un lago artificial. A los costados, varios automovilistas llamaban a sus servicios de auxilio para socorrer sus vehículos que habían quedado varados y afectados por el agua.
Sin embargo, la nota del día la dio Flavia Palmiero, ex mujer de Franco Macri -y por lo tanto ex madrastra de Mauricio-, quien pidió auxilio vía Twitter, porque su casa se innudaba. La tuitósfera respondió con bromas al desesperado pedido de auxilio de la ex conductora de "La ola verde".
Lo cierto es que las promesas de campaña de Macri están lejos de cumplirse, Buenos Aires se inunda con mayor frecuncia y las obras que el Gobierno Porteño lleva adelante no sólo no se finalizaron, si no que además tienen graves denuncias en su contra.
El jefe de gabinete porteño, Horacio Rodríguez Larreta, salió a defender al gobierno de la Ciudad de las críticas, señalando que "Lo de Mauricio no reflejará eficiencia en la gestión, pero no se puede negar que pone de manifiesto una lógica abrumadora: la ciudad de se llena de agua y él qué hace?... Nada".
No hay comentarios:
Publicar un comentario