LA MEDIDA SE DIO SIMULTÁNEAMENTE EN TRES PUNTOS DE LA CIUDAD PARA EXIGIR LA REINCORPORACIÓN DE LOS DESPEDIDOS. ACOMPAÑARON FAMILIARES, VECINOS DE AZUL, ORGANIZACIONES POLÍTICAS, SINDICALES Y ESTUDIANTILES.
Trabajadores de la Fanazul, la sede de Fabricaciones Militares de Azul, que anunció su cierre dejando 219 empleados en la calle, continúan ayer con un plan de lucha con el corte de la ruta 3 para exigir la reincorporación de los compañeros.
La ruta estuvo cortada en su cruce con la 60, que conecta Azul con Rauch y Dolores. También en el empalme de la 3 con la ruta nacional 226, que hacia el norte de Azul sale a Olavarría y hacia el sur a Tandil y Mar del Plata, entre otras ciudades. Lo mismo ocurrió en el cruce con la 51, que lleva hacia Bahía Blanca.
La medida, que contó con el apoyo de vecinos, familiares, organizaciones sociales, políticas y sindicales, continuará hasta obtener alguna respuesta de las autoridades.
El sábado pasado, el Concejo Deliberante de Azul aprobó la “emergencia laboral” en el distrito, con el objetivo de suspender por un año los despidos en la administración pública, dado el perjuicio que ya ocasionó a los habitantes de la pequeña ciudad los 200 despedidos de Fanazul.
No obstante, la medida no alcanza a los trabajadores de esta última, ya que la fábrica está bajo la órbita del régimen fascista nacional.
Los rumores sobre el cierra de esa planta circularon desde mediados de 2017. Durante la campaña por las legislativas de esos días, el jefe de Gabinete, Marcos Peña Braun Menéndez, los había calificado de falsos y junto al intendente local, negó que hubiera a haber despidos en Fanazul.
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