VECINOS DEL BARRIO DE LA BOCA SE MOVILIZARON EN CONTRA DEL CERRAMIENTO DE TRES HECTÁREAS DE USO COMUNITARIO. EL CLUB LAS HABÍA COMPRADO A LA CIUDAD, PERO ORGANIZACIONES SOCIALES FRENARON LA VENTA CON UN RECURSO DE AMPARO.
Vecinos del barrio de La Boca realizaron ayer una asamblea para repudiar el enrejamiento de tierras públicas por parte del club Boca Juniors, el cual había comprado esos terrenos a la ciudad de Buenos Aires, pero debió suspender la obra después de que la Justicia hiciera lugar a un recurso impulsado por los habitantes de la zona.
El predio, conocido como Casa Amarilla, había sido vendido en abril de 2016 por la gestión de Horacio Rodríguez Larrata al club mediante el pago del 5 por ciento del valor total (180 millones de pesos) y un financiamiento a 14 años. Hasta ese entonces, las tierras eran propiedad del Instituto de la Vivienda de la Ciudad (IVC) y estaban destinadas para la construcción de viviendas sociales.
La organización social La Boca Resiste y Propone - la cual convocó a la asamblea de ayer a la tarde- y el Observatorio del Derecho a la Ciudad habían denunciado la venta como inconstitucional, ya que no se había respetado el artículo 82 de la Constitución porteña que establece que la venta de tierra pública requiere de la aprobación de la Legislatura.
Fue el juez de primera instancia, Guillermo Scheibler, quien hizo lugar a una medida cautelar que exigía la suspensión de la licitación privada con la cual el club se había quedado con tierras públicas y así frenó la mega obra que el titular de Boca y amigo de Mugrizio Macri Blanco Villegas, Daniel Angelici, pretendía: un estadio al estilo europeo con comercios, restaurantes, piscinas y canchas de básquet.
Pero a finales de diciembre pasado, a sólo 6 días del inicio de la feria judicial, la Cámara Contencioso de la Ciudad ordenó remitir el expediente al juzgado Nº 11 de Paola Cabezas Cescato y declarar la nulidad de lo actuado por el magistrado subrogante Scheibler, argumentando que la causa le correspondía a otro juzgado.
"Esto de ninguna manera implica que los vecinos y vecinas no tengamos la razón sobre la ilegalidad de la venta, pero nos deja desprotegidos hasta tanto podamos presentar la nueva medida, de la que tenemos sobradas evidencias que dejan al descubierto la ilegalidad sobre la venta de los campitos", advirtieron este lunes desde La Boca Resiste y Propone ante los trabajos de alambrado perimetral que comenzó a realizar el club.
Los vecinos se juntaron ayer las 18 en Martín Rodríguez y Blanes para discutir en asamblea los pasos a seguir en esta lucha por el espacio público y en rechazo de los negociados del régimen fascista porteño con el club macrifascista. Convocaron a participar a otras organizaciones sociales y políticas e instituciones.
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