La alianza de derecha Cambiemos baja la última sesión de año de Diputados, para no hablar del submarino y los mapuches

QUERÍAN TRATAR LA LEY PARA IMPEDIR CANDIDATOS PROCESADOS, PERO PREFIEREN ESPERAR A DICIEMBRE. LAS NEGOCIACIONES.

La clásica sesión de Diputados de la última semana de noviembre no se llevará a cabo este año, porque la alianza de derecha Cambiemos prefirió posponerla para evitar largos discursos sobre la desaparición del submarino y el asesinato por la espalda del joven Rafael Nahuel durante durante la represión de Prefectura a una comunidad mapuche.

Por este último tema, hay presión del kirchnerismo pero sobre todo del Movimiento Evita: el diputado Leonardo Grosso fue el primero en anticipar un pedido de juicio político contra Patricia Bullrich Luro Pueyrredón. "Ya tiene dos muertos en la espalda", denunció.

El plan del oficialismo era sesionar para aprobar algunos proyectos de su interés, como el que prohíbe a los condenados por corrupción ser candidatos, hecho a medida para impedir una candidatura de Cristina Fernández de Kirchner.

También está pendiente una ley para derogar las cámaras de casación creadas en 2013, parte del plan de reformas judiciales de la alianza de derecha Cambiemos, que el miércoles tuvo su primer capítulo con la ley de subrogancias aprobada y enviada al Senado.

Pero ya el viernes en el oficialismo hablaban de postergar la sesión para diciembre, cuando se espera una intensa agenda con sesiones tal vez hasta el último día de diciembre. Silvia Lospennato, secretaria parlamentaria del oficialismo, se preocupó en averiguar que proyectos perdían estado parlamentario al terminar el mes. 

Una opción que evalúan es sesionar el miércoles 6, minutos después de la jura de nuevos diputados pero aún con los más antiguos en sus bancas para votar.

Claro que ese día sólo podrán tratarse proyectos pedidos por el régimen macrifascista en una convocatoria a extraordinarias. Mugrizio Macri Blanco Villegas sabrá cuáles son sus prioridades.

En el oficialismo tampoco confían en acuerdos con el Frente Rejuntador de Sergio Massa, la fuerza opositora más grande después del kirchnerismo, al menos hasta el 10 de diciembre.

"Graciela Camaño no responde. No quieren sesionar", repetían y sospechaban que vuelva a sorprender con maniobras como la paridad de género, que convulsionó a todos los bloques por igual. Prefieren evitar riesgos.