Nélida Rojas obtuvo la prisión domiciliaria

LA DIRIGENTE DE LA TUPAC AMARU DE LA PROVINCIA DE MENDOZA LLEVABA 70 DÍAS DETENIDA EN EL MARCO DE LA PERSECUCIÓN JUDICIAL CONTRA LOS REFERENTES DE ESA ORGANIZACIÓN SOCIAL

La dirigente de la Tupac Amaru en Mendoza, Nélida Rojas, recibió el beneficio de la prisión domiciliaria después de dos meses en los que la justicia mendocina rechazó sistemáticamente los pedidos de los abogados defensores y demoró hasta ayer a la mañana la primera audiencia para revisar el pedido de prisión preventiva hecho por la fiscal Gabriela Chaves. "Las imputaciones son aberrantes", insistió el abogado Horacio Báez, en referencia a las causas por extorsión y asociación ilícita que Chaves impulsa contra Rojas, su marido, dos de sus hijas y su nuera, todos con detención domiciliaria. "Seguiremos reclamando la libertad de todos los presos políticos", aseguraron desde la Tupac Amaru. 

Rojas, de 62 años, fue la última en recibir la prisión domiciliaria. Permaneció 70 días detenida en el penal de Agua de las Avispas "sufriendo el frío y durmiendo en un colchón fino como un cartón", denunció Báez. "Nélida tiene problemas en las rodillas y tuvo cuatro operaciones de columna, además en los últimos estudios que se le realizaron surgieron problemas de corazón", agregó su abogado. La domiciliaria fue otorgada por la jueza de Garantías Cristina Pietrasanta, quien dos semanas atrás había rechazado el mismo pedido.

El cambio de postura llegó luego de que Alfredo Guevara, el otro abogado de la defensa, presentara un nuevo hábeas corpus. "La Cámara ordenó que se terminaran de hacer los estudios y que se convocara a una audiencia", indicó Báez. Los abogados habían reclamado la realización de la audiencia para revisar el pedido de prisión preventiva 48 horas después de que Rojas fuera detenida, como marca el procedimiento. Sin embargo, hasta que llegó a Pietrasanta, la causa contra los militantes de la organización social pasó por cuatro jueces, uno de los cuales fue recusado y otros tres se declararon incompetentes. 

Nélida, al igual que su marido Ramón Martínez; sus las hijas, Leonela y Carla Martínez; y su nuera, Fanny Villegas, están acusados por la fiscal Chaves por extorsión y asociación ilícita. "Fueron estipuladas como extorsiones las funciones habituales de cualquier cooperativa o asociación política, desde decir que se pague la cuota social hasta convocar a una movilización para reclamar los fondos para las obras", señaló el abogado.

"Otra imputación aberrante, que no resiste análisis, es la de asociación ilícita a las 42 personas que integraban la cooperativa. La imputación tiene carácter retroactivo y se remonta al 2007, año en que se creó la organización. Para la fiscal el único motivo de la creación de la Tupac fue para cometer delitos", señaló el letrado y consideró que la jueza confirmará las imputaciones contra Rojas "repitiendo todo lo que le ha dicho la fiscal". 

La semana pasada, la dirigente había sido visitada en el penal de Agua de las Avispas por los integrantes del Comité de Liberación de Milagro Sala, quienes le transmitieron su solidaridad y el reclamo de su libertad. “Las tupaqueras somos como las hormigas. Estamos organizadas. Nos pueden pisotear pero vamos a seguir adelante”, celebró Nélida en aquella oportunidad.