La puesta en escena podía fallar... Y falló: Macri visitó una planta de Peugeot y los trabajadores lo recibieron al grito de "¡Aguante Cristina!"

EL PRESIDENTE LLEGÓ AYER A LA MAÑANA PARA INAUGURAR LA FÁBRICA DE PSA-PEUGEOT EN EL PALOMAR Y LOS OPERARIOS LE HICIERON PASAR UN MAL MOMENTO.

Mugrizio Macri visitó ayer una planta remodelada de PSA-Peugeot en la localidad bonaerense de El Palomar, donde se encontró con una sorpresa poco grata: algunos trabajadores lo escracharon al grito de "¡aguante Cristina!".

En el video, que comenzó a circular a la mañana por Twitter, se ve la incomodidad del ex hijastro de Flavia Palmiero cuando los empleados vivan a Cristina.

El hecho molestó en particular a Macri porque, a diferencia de otros episodios, esta vez se ocurrió adentro de la planta, por lo que el régimen no puede salir a decir que se trató de un escrache organizado por militantes sino que fue realizado por los mismos trabajadores de la compañía.

"Esta mañana participé de la reinauguración del centro de producción El Palomar de Peugeot", publicó el imbécil en su cuenta de Twitter, donde compartió una foto con empleados, en un intento de bajarle el tono al escrache y mostrar el apoyo de los demás trabajadores de Peugeot. Enseguida, otras imágenes similares fueron difundidas por Presidencia.

El escándalo crece si se tiene en cuenta que desde el miércoles se sabía que a los empleados de la fábrica les habían dado la posibilidad de tomarse el día libre para evitar algún tipo de escrache al infeliz; algo que, finalmente, no pudo lograrse.

“Me emociona volver a esta fábrica donde pasé tantos años e hice tanto en este esfuerzo de poner cada uno su granito”, recordó a propósito del pasado del Grupo Macri en el sector automotriz.

En un ámbito de trabajadores amigables especialmente seleccionados, se permitió contar “me lo encuentro a Salinas”, un empleado que en sus años en la empresa se ocupaba de ponerle las ruedas a los autos. 

“Juntos vivimos momentos difíciles en esta competitiva y estresante industria automotriz”, completó la anécdota, aunque no aclaró si esos “momentos difíciles” tuvieron que ver con el caso del contrabando de autos del que zafó gracias a la mayoría automática de la Corte Suprema de Justicia menemista.

Durante su discurso en la planta, Macri reconoció que "para muchos no arrancó todavía" el crecimiento económico y que hay muchos argentinos que "están poniendo el hombro en este momento", que definió como una "transición dura y difícil".

"Más allá de que la economía comienza a dar sus primeros pasos en el camino del crecimiento, para mucha gente todavía no arrancó" dicha mejora, afirmó y enseguida aclaró que "hace veinte años que no le arranca y hace diez que no encuentra una posibilidad".

No obstante, aseguró que "esta vez estamos haciendo las cosas de fondo, sin atajo, sin mentiras, para crecer décadas porque esa es la forma de rescatar a millones de argentinos de la pobreza". 

El idiota confeso una vez más habló de la importancia del "diálogo" y destacó que -en el caso de la planta de Peugeot- se trata de una "apuesta" que hace a la Argentina, al trabajo de los argentinos, a la "calidad" con que podemos hacer las cosas. "Es una demostración de confianza a este camino que comenzamos hace 15 meses", afirmó.

En tanto, otro video grabado por los trabajadores expuso la nueva puesta en escena montada por el equipo de marketing del régimen fascista.

En su visita a Peugeot, Macri pretendió hacer ver que se mostraba cerca de los trabajadores pero el video filtrado lo contradice, al demostrar que mientras el pelotudo hijo de puta y su cohorte de alcahuetes caminaban aislados por un sector de la planta semi vacía, los trabajadores permanecían a varios metros de distancia, detrás de un alambrado, sin posibilidad de tomar contacto con imbécil (ambos videos aparecen compaginados en uno solo a continuación).