EL PRESIDENTE DE MÉXICO LE DIJO QUE POR AHORA SEGUIRÁ APOSTANDO AL "DIÁLOGO CONSTRUCTIVO" CON EL MAGNATE YANQUI.
Mugrizio Macri se comunicó ayer con su par de México, Enrique Peña Nieto, para ratificarle la solidaridad de Argentina en la dura situación que enfrenta por las agresiones del norteamericano Donal Trump.
El priista le agradeció a Macri las muestras de solidaridad y le confirmó el interés de su gobierno de seguir negociando un acuerdo bilateral que amplíe el libre comercio entre ambos países.
De acuerdo con información de Notimex, durante la conversación telefónica se refirieron a las negociaciones comerciales en curso entre ambos países y confirmaron el interés de seguir negociando un acuerdo bilateral que permita profundizar los vínculos y ampliar el libre comercio.
Macri le indicó a Peña Nieto que México es un mercado muy atractivo para las exportaciones argentinas y el presidente Peña Nieto señaló que ha instruido a la Secretaría de Economía que conduce Idelfonso Guajardo a dar alta prioridad a las negociaciones comerciales con dicho país.
La llamada del ex hijastro de Flavia Palmiero se dio un día después que en una entrevista con el diario El País, la canciller Susana Malcorra, revelara que Argentina y todos los países de la región no hacen un pronunciamiento más fuerte en favor de México, por expreso pedido de la cancillería de ese país, que conduce Luis Videgaray, que todavía no quiere extremar la tensión con Trump, en un intento para muchos equivocado por esperar una moderación del magnate.
De hecho, el domingo Trump volvió a humillar a Peña Nieto al afirmar en una entrevista con Fox que el presidente mexicano "no es capaz" de enfrentar el desafío de los carteles de la droga y por eso le ofreció -amenazó- con enviar tropas norteamericanas a su país.
Hasta ahora ningunas de estas agresiones ha hecho reaccionar a Peña Nieto, que incluso ayer en la conversación con Macri le reafirmó la voluntad de su gobierno de resolver las diferencias con la administración del republicano por la vía del diálogo constructivo y respetuoso entre dos naciones soberanas. Un excelente compendio de lugares comunes y buenas intenciones que hasta ahora no ha mellado el ánimo combativo de Trump.
La solidaridad de Macri no es casual. Arrastra con Trump una mala relación desde que chocaron por negocios de real state en Manhattan en los noventa, cuando el republicano le hizo perder al presidente un negocio multimillonario, que una vez como jefe de Gobierno de Buenos Aires, el idiota confeso se cobró al denegarle al magnate el permiso para que construya torres en la Ciudad.
Esa mala relación se agravó cuando Macri apostó abiertamente por Hillary Clinton y luego una vez que ganó se filtrara que Trump aprovechó el llamado de felicitación para volver a pedirle que le deje construir en Buenos Aires. Pocas semanas atrás Trump pareció empezar a cobrarse esas deudas al bloquear la importación de limones de Argentina a Estados Unidos, que había autorizado Obama.
No hay comentarios:
Publicar un comentario