EL RÉGIMEN MACRIFASCISTA DEJÓ DE ACTUALIZAR LOS DATOS SOBRE LOS SUBSIDIOS MENSUALES AL TRANSPORTE PÚBLICO.
Al igual que la situación planteada en el INDEC por la falta de difusión de los índices oficiales, en el ministerio de Transporte comandado por Guillermo Dietrich también se registra la existencia de otro “apagón estadístico” vinculado con los subsidios al transporte público de pasajeros.
Desde que desembarcó en la Casa Rosada en diciembre pasado, el régimen de Mugrizio Macri dejó de informar los montos de las compensaciones económicas que desembolsa mensualmente a las empresas de colectivos y a las operadoras ferroviarias de la región metropolitana.
Los últimos datos que figuran en el sitio web del área de Transporte sobre los subsidios que paga el Estado para mantener congeladas las tarifas de los trenes y ómnibus urbanos corresponden a los meses octubre y noviembre del año pasado y son los que habían subido los funcionarios del ex ministro Florencio Randazzo.
Pese a que todos los meses autorizan la acreditación de los aportes destinados a cada una de las empresas transportistas, el equipo de colaboradores de Dietrich decidió, sin ninguna aclaración previa, interrumpir la actualización periódica de los subsidios que constituyen una variable clave para poder seguir la evolución del gasto fiscal.
Los números que figuran en la página oficial de la cartera de Transporte indican que, en el caso de los servicios ferroviarios, los subsidios pagados en octubre del año pasado ascendieron a un total de 1.232 millones de pesos.
La mayor parte – 1112 millones de pesos—fueron para las líneas que opera el Estado por medio de la SOFSE: Roca, Sarmiento, Mitre, San Martín, Belgrano Sur y Tren de la Costa. En tanto los 120 millones de pesos restantes se destinaron a los ferrocarriles Urquiza y Belgrano Norte que están en manos de las privadas Metrovías y Ferrovías.
Por el lado de los colectivos, los últimos datos disponibles muestran que en noviembre de 2015 los subsidios treparon a 3.483 millones de pesos. De ese total, 3.349 millones de pesos se volcaron a las empresas de todo el país que prestan los servicios de corta y media distancia. Y los 134 millones de pesos restantes se repartieron entre las compañías que operan los viajes de larga distancia.
La difusión de los subsidios que reciben los dueños de los colectivos y las concesionarias ferroviarias había arrancado a mediados de 2012 con un mecanismo informativo que fue identificado con la denominación de “Aportes de Todos los Argentinos al Sistema de Transporte Público de Pasajeros”.
A las pocas semanas de absorber el área de Transporte, el ex ministro Florencio Randazzo hizo suya una iniciativa del ex interventor de la CNRT, Eduardo Sícaro y comenzó a informar en la web las sumas mensuales que el Estado destina a los servicios de colectivos, subtes y trenes.
En el caso de los subtes, los datos se discontinuaron a partir de 2014 porque el servicio pasó a depender íntegramente del gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.
De acuerdo con los cálculos que manejan los técnicos del sector, el total de los subsidios a trenes y colectivos que rondaba en torno de los 4.700 millones en noviembre llegaría ahora a los 5.500 millones mensuales por la incidencia que tuvieron en los costos operativos los últimos aumentos del gasoil y los seguros.
Además de no tener los datos actualizados de lo que se está pagando, el “apagón informativo” que dispuso Dietrich va a contramano del nuevo proyecto de acceso a la información pública que el ministerio de Interior prevé enviar en los próximos días al Congreso.
Según anticipó el secretario de Asuntos Políticos e Institucionales, Adrián "Pantriste" Pérez, con el nuevo marco legal todos los ministerios y organismos estatales que manejen subsidios deberán informar públicamente cuánto recibieron y qué destino les dieron a esos recursos. Y en caso de que un particular solicite información específica sobre esos fondos, deberán brindarla en forma gratuita y en un plazo que no supere los 15 días.
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