LUEGO DE PERMANECER CUATRO MESES EN EL CALAFATE, LA EX MANDATARIA LLEGÓ EN UN VUELO DE LÍNEA QUE ATERRIZÓ A LAS 21:46 EN EL AEROPARQUE JORGE NEWBERY.
La ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner arribó anoche a la Ciudad de Buenos Aires para declarar mañana en la Justicia en el marco de la causa en la que se encuentra imputada por la venta de dólares a futuro y la militancia kirchnerista la aguardaba para darle una importante bienvenida en el Aeroparque Metropolitano.
Luego de permanecer cuatro meses en la ciudad patagónica de El Calafate, la mandataria abordó el vuelo de línea número 1893 que aterrizó a las 21:46, desde donde se trasladó a su departamento del barrio porteño de Recoleta.
Tanto en la salida desde la ciudad turística, como en la puerta del hall central del Aeroparque y de su domicilio porteño era aguardada por simpatizantes y militantes kirchneristas, que preparan además una multitudinaria concentración para este miércoles en los tribunales de Comodoro Py, donde debe declarar en horas de la mañana.
Entre miles de militantes que la aguardaban había banderas de La Cámpora, de Nuevo Encuentro, de los radicales de Los Irrompibles y de Resistiendo con Aguante. Todos ellos se agolparon en el sector de arribos, donde se montó un operativo especial de seguridad. En el aeroparque se encontraban Oscar Parrilli y los diputados Andrés Larroque y Mayra Mendoza, entre otros, y las organizaciones La Cámpora, la Tupac, Unidos y Organizados y Nuevo Encuentro.
Tras saludar a los manifestantes, Cristina se dirigió a su domicilio sin hacer declaraciones a la prensa, en el marco de una caravana custodiada por efectivos de la Policía Federal.
La ex presidenta había partido de El Calafate en el vuelo de Aerolíneas Argentinas 1893 a las 19.25 y llegó a la capital antes de los previsto ya que su arribo estaba estipulado a las 22.15 y lo hizo a las 21.46.
Los responsables del operativo de seguridad definieron que el vehículo que iba a transportarla se retire por el portón de salida de la calle Sarmiento, el sector en el que habitualmente utilizan los pasajeros de vuelos privados, con la intención de evitar que la concentración de seguidores de la ex presidenta, prevista desde varias horas antes de la llegada del vuelo, entorpezca el movimiento de la estación aérea, con cortes de circulación en la Avenida Costanera, lo que no fue aceptado por Cristina se dirigió a la multitud desde la zona cercana al estacionamiento descubierto.
Frente a su domicilio en el barrio de Recoleta, también la aguardaban ciento de militantes, ques formaron un cordón alrededor del vehículo que la transportaba que avanzó con dificultad entre los manifestantes y la marea de fotógrafos que buscaban tomar imágenes.
Por último, Cristina pudo ingresar a su domicilio donde la esperaba su hija Florencia cerca de las 22.40 en medio de una multitud que coreaba consignas alusivas a la liturgia kirchnerista, mientras sonaban bombos y se agitaban banderas del Peronismo Militante. Algunos lucían remeras con la leyenda "Si la citan a ella nos citan a todos".
Los manifestantes habían comenzado a concentrarse cerca de las 19 en la intersección de Juncal y Uruguay, una hora después arribó al lugar la hija de la ex mandataria.
Mañana, la presidenta prestará declaración ante Bonadio en los tribunales de Comodoro Py a partir de las 10. En ese marco, está prevista una manifestación de apoyo convocada por las distintas organizaciones kirchneristas, el Frente para la Victoria y el Partido Justicialista bonaerense, entre otras agrupaciones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario