ABUELAS DE PLAZA DE MAYO Y MADRES-LÍNEA FUNDADORA DENUNCIARON LA NEGATIVA DEL EX HIJASTRO DE FLAVIA PALMIERO, QUIEN A TRAVÉS DE UNA CARTA ARGUMENTÓ NO TENER TIEMPO. REPRESENTANTES DE LOS ORGANISMOS SE REUNIRÁN CON MARCOS PEÑA EL MIÉRCOLES.
A la luz de los últimos acontecimientos, el líder del régimen fascista, Mugrizio Macri, decidió definir su política de Derechos Humanos sin el consenso de los organismos. En los últimos días, el ex hijastro de Flavia Palmiero rechazó reunirse con los referentes de las instituciones, quienes el 8 de enero habían solicitado un encuentro con él para conocer la política que va a aplicar en la materia.
"Mediante una carta dijo que no puede recibirnos. Adujo no tener tiempo por actividades múltiples. Nos derivó con Marcos Peña", explicó Estela de Carlotto, presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo. "Estamos preocupadas", añadió "Taty" Almeida, integrante de Madres-Línea Fundadora.
Tras la negativa del hijo de puta, los organismos debatieron si correspondía presentarse a la cita con el jefe de Gabinete, Marcos Peña, agendada para el próximo miércoles. "Vamos a ir", adelantó "Taty", no sin antes destacar que "Macri tiene tiempo para recibir a muchísima gente pero a nosotros no. No le ha llegado el momento de contestarnos cuál va a ser la política de Estado en materia de Derechos Humanos. Parecería que no la tiene clara".
Por su parte, Estela resaltó estar "viviendo momentos muy duros, inquietantes. Vemos muchas conductas agresivas que se nos van incorporando a lo cotidiano. Todo esto nos está dejando un sabor de un autoritarismo terrible que desprecia al pueblo".
Basta tomar como botón de muestra lo que sucede en el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos, a cargo Germán Garavano, para comprender las palabras de la titular de la Abuelas: hasta el jueves se estimaba en casi 500 los despedidos en esa cartera. Entre ellos se encuentran integrantes de áreas estratégicas como el Programa de Verdad y Justicia.
En sintonía con esta situación, el pasado miércoles el gobierno macrista decidió vía decreto desplazar de la presidencia del Archivo Nacional de la Memoria (ANM) al nieto restituido Horacio Pietragalla.
Los organismos habían solicitado mantenerlo en el cargo porque lo consideraban "el guardián verdadero y confiable de ese espacio". En el archivo se guardan documentos sensibles que "sirven para el juzgamiento de los responsables de los crímenes que perpetró la dictadura", explicó Estela.
El propio Pietragalla había pedido que su sucesor surgiera del consenso con las instituciones de Derechos Humanos. Pero no fue escuchado. En su lugar se nombró a Gustavo Luis Jesús Peters Castro, quien se desempeñaba como representante del gobierno porteño en el ente que administra la ex ESMA, y asumió el viernes.
El cuadro se completa con una fotografía que dejó difundir el flamante secretario de Derechos Humanos de la Nación, Claudio Avruj, y que avivó la caduca Teoría de los dos Demonios. El 14 de enero trascendió una imagen en la que se lo ve en un encuentro oficial junto a integrantes del Centro de Estudios Legales sobre el Terrorismo y sus Víctimas. Se trata de una ONG que pretende el juzgamiento de militantes de las organizaciones armadas durante la década del '70. Fue la "primera vez en 30 años de democracia que un funcionario nacional recibe a la ONG de las víctimas del terrorismo", reconoció la presidenta de la asociación, Victoria Villarruel.
Avruj junto a Garavano fueron los únicos funcionarios que recibieron a los organismos, a cuatro días de asumir el gobierno. Entonces transmitieron que la nueva administración mantendría "lo que se había hecho bien" en la materia. Una arbitrariedad que se esperaba esclarecer en un encuentro con el primer mandatario. Pero por ahora, Macri esquiva el convite. Hasta el momento es el primer presidente en hacerlo desde, lógicamente, el regreso de la democracia.
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