El presidente de la Cámara de Diputados ponderó a "la industrialización" y "la generación de valor agregado" como dos factores "determinantes para la democracia", al intervenir en el primer foro parlamentario Italia-América Latina y el Caribe.
"Es determinante para nuestra democracia la creación de valor agregado. Debemos dar un salto cualitativo en su generación, y lograr un proceso de industrialización que vaya ampliando la participación de las clases medias", apuntó Domínguez ayer, al participar en Roma en el primer foro parlamentario Italia-América Latina y el Caribe.
"La industrialización y creación de valor agregado son las principales interpelaciones de la democracia para achicar la brecha de la desigualdad", agregó el presidente de la Cámara de Diputados en el evento en el que participaron también su par italiana Laura Boldrini y el presidente del Senado de ese país, Pietro Grasso.
“La apuesta es afianzar el sistema productivo para que prevalezca por sobre el sistema financiero, con un proceso agresivo de industrialización de la producción primaria para que nuestra economía no quede rehén de la volatilidad del precio de los commodities”, remarcó Domínguez.
“Argentina es un país desendeudado y esa política de desendeudamiento nos permitirá redireccionar la inversión para cumplir con nuestra obsesión de reindustrializar el país”, agregó.
Asimismo, destacó que entre 2003 y 2014 “el PBI industrial aumentó un 83 por ciento y se crearon más de 300 parques industriales, y ahora es el momento de incentivar la repatriación de capitales y la sinergia público-privada para ir por 300 parques industriales más en los próximos cuatro años”.
En esa línea, detalló que “en Argentina las exportaciones de manufacturas de origen industrial pasaron de un 26,9 por ciento a un 33,6 evitando la primarización de la economía, y la meta para los próximos años es alcanzar el 50”, .
“Estos desafíos deben ser parte de una planificación estratégica productiva de mediano y largo plazo, que convoque a todos los actores del sector”, continuó Domínguez, al tiempo que abogó para que “los planes estratégicos sean una política de Estado en las esferas nacional, provincial y municipal”.
El presidente de la Cámara de Diputados sostuvo que “para dar el salto en el desarrollo industrial, es fundamental continuar con el impulso a la ciencia y la tecnología”, e hizo hincapié en que “la formación de profesionales, técnicos y científicos debe estar orientada a fortalecer el sistema productivo y a la industrialización de la ruralidad”.
“Argentina va a encarar un proceso donde la educación esté necesariamente vinculada al sistema productivo”, expresó Domínguez y remarcó que "actualmente hay 53 universidades nacionales distribuidas en todo el territorio, y el desafío es crear nuevas universidades de carácter federal y vincular la enseñanza a las capacidades productivas de cada región para que los profesionales no necesiten dejar su lugar de origen y puedan liderar una transferencia de conocimiento”.
Acompañado por la diputada sanjuanina Daniela Castro, Domínquez destacó también durante su participación las palabras del papa Francisco durante su último viaje a Estados Unidos y recordó que el Santo Padre puso al "bien común" como uno de los objetivos principales de la "acción política".
El diputado destacó la aprobación en Naciones Unidas (ONU) del marco regulatorio para las negociaciones de deuda ya que, estimó, "es la muestra de que queremos cumplir con todas nuestras obligaciones pero de forma sustentable y sostenible: no con los parámetros ajenos del sistema financiero internacional y sí con los parámetros que se da una nación para financiar su desarrollo".
Finalmente, tildó como "una amenaza a la gobernanza global" a la "militarización del Atlántico Sur", ya que allí "hay ejercicios militares, una política de extracción de recursos y que comprometen la estabilidad de la región y las políticas sobre la Antártida en un futuro".
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