El secretario general adjunto de ATE Capital, Humberto Rodríguez, anticipó que las discusiones paritarias con el Ejecutivo porteño “serán complicadas porque en vez de respuestas concretas a las demandas nos ofrecen espejitos de colores”.
Rodríguez anticipó que ese gremio estatal le demandará al gobierno porteño un 40% de aumento y aseguró que, a pesar de ser año electoral, prevén una “paritaria muy complicada dado que en vez de soluciones nos ofrecen espejitos de colores”.
“Nuestro planteo es que, como mínimo, debería otorgar un 40% de aumento, ya que el índice de inflación del macrismo arroja un suba de 38%”, indicó el gremialista al tiempo que no descartó pedir algunos puntos más, si la respuesta es un aumento escalonado.
Según Rodríguez, durante los últimos años se aplicaron aumentos “similares” a la suba que arroja el índice de precios local, pero “al aplicarse en varias cuotas, la última de ellas dentro de 12 meses, siempre el incremento es más nominal que real”.
En este sentido, recordó que en 2014 se acordó un aumento del 34% que “en realidad fue apenas arriba del 20%”, lo que “a pesar de la inflación, le ha permitido al gobierno porteño reducir 5 puntos el costo laboral en los últimos años, en detrimento de las condiciones de los trabajadores”.
El dirigente estatal también detalló que hoy en la función pública porteña existen más de 30000 trabajadores que no tienen la categoría correspondiente a la función que desempeñan.
“Lo cierto es que de 60.000 trabajadores 35.000 están en el escalafón más bajo de una carrera administrativa que fue paralizada por el PRO y por lo tanto, hoy no cuenta con ninguna posibilidad de ascender o especializarse en sus sectores”, agregó, el tiempo que señaló que la falta de expectativa de movilidad en el trabajo, “repercute en la economía del trabajador, pero también en la calidad de las políticas públicas que se pueden impulsar desde el Estado”.
Durante los último años, con el retiro voluntario y jubilación de los agentes estatales, se incorporaron nuevo trabajadores que “al estar contratados, no ingresan a la carrera lo que una gran meseta en la base del escalafón y, por el contrario, sí aplican la carrera haciendo concursar a los cargos políticos y jerárquicos”.
Si bien los gremialistas reconocen que se está discutiendo una nueva carrera, “un nuevo nomenclador de puesto, la realidad es que es una gran zanahoria porque no termina de avanzar y mientras tanto tenemos un empleo público devaluado y precario que impacta en el funcionamiento del estado local”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario