La jueza Sandra Arroyo Salgado, ex mujer del fallecido fiscal Alberto Nisman, pidió que el patrocinio de la querella sea asumido por un funcionario de la Defensoría General de la Nación. La magistrada cuestiona la investigación de la fiscal.
La resolución de la Defensoría General de la Nación nombró al defensor público, Germán Carlevaro, como representante de la familia de Alberto Nisman, por lo que el abogado particular Jorge Breiman, que había sido nombrado inicialmente, quedó desplazado del expediente.
El pedido fue realizado la jueza Sandra Arroyo Salgado, ex mujer de Nisman y representante de sus hijas en la querella, tras considerar que el organismo es el único capaz de trabajar con el “desenvolvimiento profesional, idóneo y ético” necesario para alcanzar la verdad.
La ex mujer del fiscal fallecido defendió el pedido por “la trascendencia e intereses de magnitud aún desconocidos que subyacen a la instrucción a cargo de la fiscal Viviana Fein, convencen a la suscripta de que el valor 'justicia' y el anhelo por el descubrimiento de la verdad solo habrán de alcanzarse a partir del desenvolvimiento profesional, idóneo y ético de las partes que intervienen en el proceso”.
La propia Arroyo Salgado ya había manifestado en declaraciones anteriores su descontento con el curso de la investigación. “Se dieron a conocer demasiadas medidas a los medios de comunicación que van a terminar malogrando la investigación. En algunos casos se tomaron decisiones de las que nunca fuimos notificados”, dijo en relación al trabajo de la fiscal Fein.
Frente a este escenario, la magistrada consideró que “solo encuentro garantías en el Programa de Asistencia y Patrocinio jurídico de ese Ministerio Público de la Defensa al que tuve el honor de pertenecer”.
Además, Arroyo Salgado expresó que a su criterio “era necesario conformar un equipo capacitado en recursos técnicos e intelectuales que se aboquen al descubrimiento de lo realmente acontecido”.
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