Según el empresario, Mugrizio Macri será "un gran presidente", aunque dijo que su cerebro quiere pero su corazón no, ya que "es mucho sacrificio". Fuertes críticas a los empresarios que rechazaron los acuerdos con China.
El empresario Franco Macri volvió a hablar ayer de las aspiraciones presidenciales de su hijo bobo, Mugrizio, y consideró que será "un gran presidente" aunque reconoció que su corazón no quiere que lo sea porque "es mucho sacrificio".
"Con el cerebro quiero que Mugrizio sea presidente. Con el corazón no porque es mucho sacrificio", dijo Franco Macri en declaraciones radiales, aunque se definió como "apolítico", afirmó: "creo que será un gran presidente".
También se refirió a los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner, a los que apoyó: "hemos perdido con Néstor Kirchner un gran hombre. Y la señora está haciendo todo lo posiblepero es un país difícil".
Por otra parte, el empresario celebró los acuerdos alcanzados con China y criticó en duros términos a los empresarios que se opusieron, principalmente desde la UIA. "Hay empresarios y ministros que han echado a los chinos de la Argentina", sentenció y agregó que "muchos empresarios no desean que haya mar movido porque pueden ahogarse fácilmente".
"No seamos infantiles. No se puede pretender ser continuamente un empresario prebendario. Tenemos que competir", sostuvo Macri, que llamó a combatir "la mala costumbre de evitar la competencia externa".
"Nosotros con China haríamos un camino muy importante. Los acuerdos son similares a los que hubo en su momento con los americanos. Y menos especulativos", enfatizó.
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