martes, 26 de noviembre de 2013

Julio Cobos quedó aislado dentro del radicalismo

En su entorno dicen que apuntará a los "independientes" para la primaria de 2015.
 
Julio Cobos fue el dirigente radical que mejores resultados consiguió en las elecciones del pasado 27 de octubre. De los seis distritos en los que se impuso algún frente panradical, Mendoza, la patria chica del ex vicepresidente, en la que él encabezó la lista de diputados nacionales, fue el lugar donde el porcentaje de votos resultó mayor.
 
A pesar de esto, en el radicalismo, donde muchas veces pesa más la construcción política hacia dentro del partido que el caudal electoral, el mendocino quedó en una situación de aislamiento. Su principal rival en la interna hacia 2015, el senador también mendocino Ernesto Sanz, se quedó con la presidencia del Comité Nacional. Y el diputado por Córdoba Mario Negri-alfonsinista-agarró la conducción del bloque en Diputados. De esta manera, el ex vice perdió los dos lugares que tendrán protagonismo político natural durante los próximos 24 meses.
 
En las elecciones legislativas que se celebraron hace cinco semanas, los frentes panradicales ganaron en seis distritos. En Mendoza se impusieron con el 47,6% de los votos; en Corrientes con el 47,1; en Santa Fe, con el socialista Hermes Binner a la cabeza, con el 42,3; en Santa Cruz con el 42,1; en Catamarca con el 40; y en Jujuy con el 39,8. Es decir: la lista encabezada por Cobos fue la que mayor porcentaje de votos consiguió. Uno de los operadores políticos del ex vicepresidente okupa dijo que "en el peronismo ser ganador es un imán para el resto de los dirigentes, en el radicalismo parece que es al revés".
 
La queja del cobista se funda en el "aislamiento" que su jefe político sufrió en el reparto de los espacios de poder partidario y parlamentario, que en la UCR se definieron de modo prematuro, a mediados de este mes. En rigor, el camino de Cobos luego de la contienda electoral fue sinuoso. Al principio sostuvo que no pretendía manejar la presidencia del bloque en Diputados y, menos todavía, la del Comité Nacional, donde cuenta con pocos delegados. Esta postura dejaba la disputa por ambos espacios libre para otros sectores.
 
Por la conducción del Comité la pelea sería entre Alfonsinito y Ernesto Sanz, y en la Cámara Baja entre Negri y Oscar Aguad, que en un principio tenía el respaldo de Cobos. Pero cuando el agua comenzó a correr, el mendocino cambió de opinión. Se dio cuenta de que quedándose con la tercera vicepresidencia de Diputados, espacio que todos los sectores internos del radicalismo están dispuestos a cederle, no tenía suficiente protagonismo para su carrera presidencial.
 
La construcción política de un frente nacional panradical, que aglutine las 16 coaliciones provinciales que la UCR tiene con las "fuerzas afines", recaerá en el jefe del Comité Nacional. Si Sanz –que se quedó con ese lugar– logra la tarea, podrá erguirse como el "gran armador". Y, por otra parte, la negociación parlamentaria estará en la jefatura de los diputados. Ante este panorama, se dijo, Cobos cambió de posición y pretendió quedarse con la conducción del bloque.
 
El miércoles 13 de noviembre se reunió con el senador jujeño Gerardo Morales, partidario de la candidatura de Sanz para 2015. Cobos le dijo que no pretendía la presidencia del Comité, ofreciendo su respaldo para Sanz, a pesar de que sea su adversario. Esto sería a cambio de que ellos lo respaldaran para la jefatura de los diputados. El alfonsinitismo reaccionó de inmediato. Adelantó la designación de Negri en ese puesto, difundiendo un documento con la firma de 24 de los 40 parlamentarios que tendrá la UCR en la Cámara Baja a partir de diciembre. Cobos se quedó sin el pan y sin la torta.
 
"Tiene que hacer más política dentro del partido", reconocieron en el entorno del mendocino, que todavía paga las facturas que sus correligionarios le pasan por haberse ido en 2007 para ser el vicepresidente de Cristina Fernández. Y luego, tras el conocido conflicto que tuvo con el gobierno nacional a raíz de la Resolución 125, haber vuelto al cobijo del añejo radicalismo.
 
Los operadores del ex vice okupa señalaron, sin embargo, que Cobos –esta vez– seguirá con los pies dentro del plato. Resaltaron que, además de tratar de sumar respaldo dentro de la estructura partidaria, apuntará "hacia afuera, a la sociedad", esperando imponerse en la Primaria Abierta con el respaldo de los independientes. 

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