Aunque el paro de los aeronavegantes culminó pasado el mediodía, luego de la conciliación obligatoria que dictó el Gobierno, las consecuencias continuaron durante la tarde y se sentían en otras terminales. Las partidas se normalizaron recién al caer la noche.
Debido al descalabro que generó la huelga que decretó la Asociación de Personal Técnico Aeronáutico (APTA) y que afectó a Aerolíneas Argentinas y Austral, el aeroparque Jorge Newbery de la ciudad de Buenos Aires continuó con demoras y cancelaciones durante casi toda la jornada de ayer; si bien el paro terminó cerca del mediodía, luego de la intervención del Ministerio de Trabajo, que dictó la conciliación obligatoria.
Ayer también se registraron cancelaciones y demoras por un paro sorpresivo de otro de los gremios aeronáuticos, la Asociación Argentina de Aeronavegantes (AAA), que comprende a los tripulantes de abordo y azafatas.
Sin embargo, desde Aeropuertos Aerolíneas 2000 dijeron que entre 15 y 20 vuelos fueron cancelados por el conflicto y decenas se encontraban demorados, tanto en la terminal porteña como en otros aeropuertos del interior del país que también sufrieron las consecuencias.
Las partidas de los vuelos se normalizarían recién al caer la noche, lo que fortalecía el enojo de los miles de pasajeros que estaban en el lugar.
La medida de fuerza fue calificada de "indignante" por el ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo, quien dijo que los empleados cobran más de 20 mil pesos por mes. "Se trata de empleados muy bien pagos. Han acordado un 24 por ciento de aumento", apuntó (ver nota aparte en esta misma edición).
Aerolíneas Argentinas también consideró "injustificada" la decisión de "los dirigentes de APTA" y sostuvo que "una vez más afectan y toman de rehenes a los pasajeros".
No hay comentarios:
Publicar un comentario