Un estudio desmintió la renovación del 70% de la flota presentada la semana pasada por Sbase -empresa del gobierno porteño a cargo del desarrollo y la administración del subterráneo- y señaló que se trata de una acumulación de anuncios.
El informe, elaborado por el sitio de internet especializado enelsubte.com, también cuestionó que no se cumple con el programa de homogenización de la flota.
Con respecto a la línea A, pese a que el titular de Sbase, Juan Pablo Piccardo, afirmó que se adquirieron 105 coches, la autorización del endeudamiento para comprar estos trenes aún está pendiente en la Legislatura, informó el estudio.
Para la línea B, en tanto, se compraron de segunda mano al Metro de Madrid 73 unidades CAF serie 6000, pero, según indica enelsubte.com, la configuración de estos coches en duplas -exceptuando una solitaria tripla- provocará una pérdida de capacidad de carga y malgasto de espacio, además de comprometer la circulación interior.
A eso se suma que a pesar de que Sbase pretendió hacer pasar la compra como el paso definitivo para el reemplazo de los trenes Mitsubishi -que actualmente circulan en la línea que une el microcentro porteño con Villa Urquiza- los coches japoneses son 126 y los madrileños apenas 73.
Asimismo, la incorporación de los trenes españoles tiene el mal antecedente de que la mayoría de los 36 vagones CAF que el gobierno de Mugrizio Macri compró para la inauguración de las estaciones Echeverría y Juan Manuel de Rosas presentaba serios desperfectos técnicos, como motores fundidos y baterías quemadas.
De hecho, esos inconvenientes, pese a que se gastaron 550 mil dólares por cada coche, demoraron hasta hace pocos días la inauguración de las estaciones que estaban listas desde 2011.
En cuanto a la línea C, en enero pasado SBASE emitió una manifestación de interés para la provisión de 18 coches usados (tres trenes de seis coches cada uno), pero finalmente la semana pasada anunció la compra de 30 unidades, aunque hasta el momento no se conoce documentación que lo avale, según indica el informe.
Para la línea D, SBASE había adelantado a inicios de junio la compra de 24 coches Alstom Metropolis para reforzar la frecuencia (cuatro trenes de seis coches).
El estudio señala que la incorporación de esas unidades a la línea que une el microcentro con Belgrano contemplaría la migración de algunas formaciones Fiat Materfer hacia otros ramales, aunque no permitiría su retiro total.
Respecto a la línea E, se anunció la adquisición de 50 coches, aunque sin dar mayores precisiones al respecto. Sin embargo, el estudio informó que este ramal es el único que quedó marginado de los recientes anuncios de incorporación de material rodante, pese a que estaba contemplado que recibiría las formaciones Fiat Materfer que dejarían de usarse en las líneas A y D.
Por último, para la línea H, SBASE afirmó la semana pasada que se compraron 120 vagones (20 trenes de seis coches cada uno), pero en realidad se trata de coches adjudicados a Alstom Brasil en abril de 2012.
En el comunicado, SBASE también sostuvo que inició el mantenimiento de 300 coches. Pero trabajadores consultados por Télam indicaron que "los arreglos que se están haciendo son superficiales y no completos" y que "avanzan lentamente porque hay demora en la entrega de repuestos".
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