Denuncian los reiterados cortes de luz que dejan sin suministro a los barrios. Los vecinos afirmaron que la medida es pacífica y que sólo esperan una solución por parte del gobierno de la Ciudad.
"Desde hace años, nos quedamos todo el tiempo sin luz, y cuando vuelve se nos queman los artefactos, y hasta se han producido incendios", dijo a Télam Dora, vecina del barrio de Retiro (31 Bis).
La mujer, que integra la Corriente Villera Independiente, contó que "se ha muerto gente por estos incendios. No lo vamos a seguir soportando", dijo la mujer, que trabaja en un comercio y reside en ese barrio desde hace 13 años.
"Antes tal vez tardaban hasta una semana en darnos la luz. Ahora, como estamos en la calle protestando, vienen un poco antes pero el problema de fondo no lo resuelven", aseguró la mujer.
La protesta contra el deficitario suministro de luz a estos asentamientos se centralizó ayer en una única medida que fue la toma de dos oficinas: la de Edesur, en Alberdi 4099, y la de Edenor, en Guzmán 302.
Por la protesta, que comenzó esta mañana, las oficinas siguen ocupadas por los vecinos, que afirmaron que la medida es pacífica y sólo esperan una solución de parte del gobierno.
Un vocero de Edenor dijo a Télam que "la empresa espera que se apruebe un presupuesto para comenzar con las obras en el barrio Fraga de Chacarita y en la villa 31. De ser asi, en 60 días días podría resolverse el problema del suministro de luz".
A través de su vocero, Edesur explicó que "el suministro llega hasta la boca central de cada asentamiento y lo que acontece en el interior del barrio ya no es un tema de la distribuidora".
Igual, "recibimos a los vecinos que vinieron a la oficina a reclamarnos por el suministro de luz. Estuvimos hoy explicando que la solución no está en nuestras manos sino en manos del gobierno porteño. Somos la cara visible por eso la gente viene a nosotros".
Los reclamos se hicieron en las oficinas de ambas empresas pero apuntaron contra dos áreas del gobierno porteño: La Unión de Gestión e Intervención Social (UGIS) y la Secretaría de Inclusión y Hábitat del Gobierno de la Ciudad.
Los vecinos ofrecerán al gobierno porteño su mano de obra para realizar las obras y anunciaron que se quedarán el tiempo que haga falta en las oficinas hasta recibir el compromiso del gobierno porteño de que realizarán las mejoras.
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