Así lo aprobó el Senado, por 40 votos a favor y 25 en contra. La luz verde al pliego de la ex ministra se dio luego de fuertes denuncias formuladas por el radicalismo en contra de su nombramiento. En tanto, el oficialismo resaltó el valor de los antecedentes de Garré.
Por 40 votos a favor y 25 en contra, el Senado nacional aprobó la designación de Nilda Garré al frente de la representación argentina ante la OEA. El debate demandó poco más de una hora y el radicalismo formuló fuertes cargos contra la ex ministra.
Lideró los embates contra la ex ministra de Seguridad el senador Gerardo Morales -que todavía está tratando de entender la metáfora de los ladrillos y los Cedines-, quien contó que ayer mismo miércoles presentaron una demanda penal ante la Justicia contra la ex ministra, dado que su actitud se “encuadraría en delitos que podrían ser defraudación a la administración pública, estafa, incumplimiento de los deberes de funcionario público y enriquecimiento ilícito”. Para la bancada radical, correspondería también la aplicación de los delitos previstos en la Ley Penal Tributaria.
El infeliz de Morales contó que a diferencia de lo que pasaba la semana anterior, “tenemos ya las declaraciones juradas de los años 2006, 2007, 2008, 2009 y 2010. Yo había dicho que el delito que ha cometido la doctora Nilda Garré no solo por la incompatibilidad manifiesta por el ejercicio de dos cargos; el tema es que ha percibido una remuneración no solo en su calidad de ministra, embajadora y también una remuneración como titular de un Registro del Automotor”.
El senador jujeño detalló a continuación lo que estiman en función de las declaraciones juradas que percibió Nilda Garré como titular del Registro, y los cuales no podría percibir. El total percibido entre 2005 y 2011, que según Morales debería devolver, ascendería a 1.925.625 pesos.
“Le gusta mucho la plata a la doctora Garré”, disparó Morales y a su juicio “sería una vergüenza que este Senado apruebe el pliego de la doctora Garré".
Tras ello, tomó la palabra el senador Marcelo Fuentes, quien preguntó si “vale todo en campaña electoral” y cuestionó que la oposición pusiera en duda la honorabilidad de la mujer propuesta por el Ejecutivo para el cargo de embajadora ante la OEA.
Dijo que no hubo cuestionamientos a su idoneidad y se basó en el uso del “potencial”. “O este es el Senado de la Nación, o este es el show de Latada”, disparó en ese marco Marcelo Fuentes.
A continuación, el presidente de la Comisión de Asuntos Constitucionales detalló los nombres de propietarios de Registros pertenecientes a gente vinculada con el radicalismo, y tras referirse a la grave situación imperante en la región, la designación “nuestra representante (ante la OEA) arranca con un debate de tamaña pijotería”.
Fuentes resaltó la idoneidad y el compromiso con los derechos humanos de Nilda Garré, a lo que “se responde con un intento de arqueo de almacén con el ‘debería’, ‘podría’, ‘habría’”. Cimadevilla le replicó que el “podría” hubiera podido ser modificado, pero el expediente correspondiente a la jubilación de Nilda Garré “desapareció”.
Cerró el debate el presidente de la Comisión de Acuerdos, Marcelo Guinle, apelando a una presentación personal que realizó la doctora Garré. Allí la propuesta para el cargo de embajadora formuló una suerte de descargo, ampliando los datos correspondientes a su currículum con un minucioso relevamiento de sus actividades durante los últimos años. Contó que a partir de asumir como diputada pidió licencia como titular del Registro Automotor. Aseguró no haber omitido información sobre sus haberes, y dijo no percibir “ningún beneficio previsional”, ni haber incurrido en “incompatibilidad” alguna.
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