Luego de realizar inspecciones en varios clubes y en la Asociación Argentina de Árbitros, el organismo tributario realizó un allanamiento en la casa madre del fútbol argentino. La AFIP fue en busca de datos e información que colabore con la investigación sobre las presuntas irregularidades en los pases de los jugadores que investiga el juez Oyarbide.
Luego de inspeccionar a varios clubes de Primera división como Vélez, All Boys y San Lorenzo, entre otros, el organismo tributario irrumpió en la entidad que rige nuestro fútbol.
"Le dimos todo, no tenemos nada que ocultar", dijo el titular azulgrana, Matías Lammens, diferenciándose de su par de All Boys, Roberto Bugallo, que en un procedimiento similar de este miércoles en la sede de Floresta, resistió hasta donde pudo para entregar las computadoras.
Efectivos policiales de la Administración Federal de Ingresos Públicos se dirigieron a la sede de la calle Viamonte para conseguir datos e información concreta que ayude en la causa en la que entiende el juez Norberto Oyarbide.
Julio Grondona, titular de la AFA y Ricardo Echegaray, titular de la AFIP
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Esta investigación de la AFIP comenzó el año pasado por sospechas de irregularidades en transferencias de jugadores, triangulaciones en los pases y presunto lavado de dinero.
Oyarbide tiene en mente ir hasta las últimas consecuencias: ya ordenó la realización de 130 allanamientos en simultáneo para llegar al fondo de este asunto.
De cada sitio lograron recabar documentación importante para continuar con las tareas y también tomar imágenes fotográficas, por ejemplo a las "chapas" de los automóviles, para conocer el origen de los mismos.
Cabe destacar que las irregularidades montaron un manto de suspicacias y desprolijidades durante el transcurso del mercado de pases anterior, con decenas de representantes y jugadores en la mira, entre los que se encuentra el defensor de River Jonathan Bottinelli, quien resultó procesado por supuesta evasión tributaria.
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