Miriam Alejandra Rosalino, corresponsal en La Plata.
Luego del episodio del tuit mentiroso del intendente platense Pablo Bruera -que dijo estar ayudando en la capital provincial a los damnificados en pleno temporal cuando en realidad estaba de vacaciones en Brasil-, las explicaciones oficiales que vinieron después no conformaron a los vecinos de la ciudad. El propio jefe comunal anunció inmediatamente haber echado a su equipo de comunicación. Ahora, la gestión contrató nuevamente los servicios de viejos conocidos, ya que quienes le manejan las redes sociales post inundación son los mismos que idearon su campaña electoral en 2009, cuando rompió con el kirchnerismo.
Luego del episodio del tuit mentiroso del intendente platense Pablo Bruera -que dijo estar ayudando en la capital provincial a los damnificados en pleno temporal cuando en realidad estaba de vacaciones en Brasil-, las explicaciones oficiales que vinieron después no conformaron a los vecinos de la ciudad. El propio jefe comunal anunció inmediatamente haber echado a su equipo de comunicación. Ahora, la gestión contrató nuevamente los servicios de viejos conocidos, ya que quienes le manejan las redes sociales post inundación son los mismos que idearon su campaña electoral en 2009, cuando rompió con el kirchnerismo.
Paradójicamente, luego de sus traumáticas vacaciones en Brasil mientras la ciudad que gobierna sufría la peor tragedia climática de su historia, hoy Bruera trabaja a la par con brasileros.
“Los brasileros”, como se los conoce internamente, son un grupo de expertos en comunicación política que tienen estrecha relación con el municipio de la capital provincial. Es que fueron quienes le idearon al intendente la campaña para las Elecciones Legislativas de 2009, cuando Bruera impulsó el corte de boleta con el Frente Para la Victoria que tanto dolores de cabeza le ocasionó después en su relación con los K.
Antes de la inundación, al intendente lo asesoraba una agencia que entre otras cosas se encargaba del community management, contratados por medio del jefe de gabinete platense, Santiago Martorelli. El nexo local era Leandro Tettamanti, dueño del portal bruerista Plus Información.
Así, luego del revuelo que generó aquel “Desde ayer a la noche recorriendo los centro de evacuados” en la cuenta oficial @PabloBruera, el primer cimbronazo fue el cambio de piezas en el equipo de comunicación oficial, según el propio intendente.
Así, hace pocos días, en un asado los Bruera comentaron que habían reincorporado a “los brasileros”, o sea, los hacedores de la campaña “Decile Sí a La Plata” de hace cuatro años. Ellos fueron los cerebros en aquel armado de campaña muy vecinalista -con los hoy ultraconocidos naranja y verde como colores protagonistas-, que culminó con el corte de boleta despegándose de la lista de Néstor Kirchner y Daniel Scioli.
Hoy, quienes frecuentan las redes sociales –especialmente la cuenta de Twitter del intendente-, pueden notar un giro de 180 grados en la estrategia comunicacional. Es que Bruera relata en primera persona cada uno de sus pasos de forma insistente, mostrándose como alguien hiperactivo, que no descansa y se preocupa por los detalles; incluso sigue a quienes lo siguen y hasta envía mensajes directos en un tono amistoso.
Esa imagen amistosa de político que camina las calles a la par de los vecinos precisamente fue el eje central de aquella campaña previo a las Elecciones Legislativas de 2009. Una entrevista a Bruera en el marco de todo ese trabajo comunicacional así lo refleja; particularmente en un pasaje en donde relata cómo fue su carrera hacia la intendencia, tocando timbres y preocupado por conocer en primera persona los principales problemas de los barrios platenses, incluso, según él, caminando pese a que “venía una tormenta fuerte”, le advertían “que pare” y él, haciendo oídos sordos continuaba “porque si se inunda este barrio con esta lluvia yo me voy a dar cuenta”.
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