La reunión entre empresarios del transporte y funcionarios del gobierno nacional para destrabar el conflicto que mantiene paralizados los micros de larga distancia fracasó ayer a la noche, anunció Mario Verdaguer, de la Cámara Empresaria de Larga Distancia (CELADI).
"Hemos hecho todos los esfuerzos, pero necesitamos 70 millones de pesos por mes para hacer frente a los salarios caídos de enero a la fecha y a un posible aumento del 23 por ciento" que reclaman los choferes, dijo el empresario tras el encuentro del que participaron el ministro de Interior y Transporte, Florencio Randazzo, y de Trabajo, Carlos Tomada.
Pasajeros bloqueaban esta tarde los accesos a la terminal de ómnibus de Retiro para protestar contra el paro nacional que cumplen los choferes enrolados en la Unión Tranviarios Automotor (UTA), que desde ayer dejó a miles de personas varadas.
Por su parte, el secretario general de la UTA, Roberto Fernández, aseguraba ayer a la mañana que los micros de larga distancia no saldrían y ratificó así el paro por tiempo indeterminado que inició su gremio para reclamar mejoras salariales.
El titular de la UTA apelaba a que hubiera una nueva convocatoria del Ministerio de Trabajo, que conduce Carlos Tomada, para intentar destrabar el conflicto.
"Nosotros sabemos los pasajeros que transportamos de un lugar a otro y sabemos que este es un sector que es nacional. Esto hay que sentarse a discutirlo", insistió en declaraciones radiales.
Fernández subrayó que los trabajadores de ese sector tienen "muchos problemas" y mencionó que uno de ellos es que "las rutas están en malas condiciones".
"Nosotros llevamos personas, trabajadores, no nos queremos matar en las rutas. Esto es lo que queremos discutir con Randazzo", planteó.
El titular de la UTA consideró que, para resolver el problema de su gremio, "a lo mejor" desde el Gobierno "tendrán que poner un subsidio porque hay muchos costos".
Fernández reconoció que durante las reuniones que mantuvieron con la presidenta Cristina Fernández le manifestaron sus reclamos por los problemas en el sector de transporte de larga distancia.
"Yo con la Presidenta no tengo problema, tenemos diferencias. Claro que se lo hemos dicho, por eso nosotros estamos diciendo escúchenos a los trabajadores", indicó.
El titular de la UTA recordó que la respuesta del Gobierno fue que "van a estudiar" sus reclamos y lamentó que se tenga que hacer "una medida para tener una solución".
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