Así lo anunció el ministro de Economía, Hernán Lorenzino, quien afirmó que se crearán dos bonos para desarrollar inversiones en el sector energético e inmobiliario y atraer los ahorros en dólares de las personas. Del acto también participaron Kicillof, Marcó Del Pont, Echegaray y Moreno.
El ministro de Economía, Hernán Lorenzino, anunció ayer a la tarde el lanzamiento de un bono para el sector energético y un certificado destinado al área de la construcción, para así fomentar el desarrollo de inversiones.
Según explicó al brindar una conferencia de prensa junto con el equipo económico de la cartera, los proyectos serán enviados "hoy mismo" (por ayer) al Congreso y pretenden captar dólares no declarados.
Durante la conferencia en el Salón Tacchi de la AFIP, Lorenzino dijo que se implementarán "dos instrumentos financieros" que consistirán en "un bono con impacto directo en el sector energético y un certifica movilizador del sector inmobiliario y de la construcción en el marco de la reforma de la Carta Orgánica del Banco Central".
"Apuntamos con estas medidas a que quienes tengan ahorros en dólares sin declarar puedan usarlos para invertir en instrumentos transparentes y legales que, al mismo tiempo que resguarden esos ahorros, puedan ser utilizados en la operatorio de estos dos sectores: inmobiliario y construcción, e infraestructura e hidrocarburos", afirmó Lorenzino.
Según sostuvo el ministro de Economía, el objetivo es seguir movilizando el ahorro privado: "En este caso, otorgando un estímulo para transformar recursos ociosos, no declarados, que están en una caja de seguridad, que no tiene ninguna rentabilidad, o en el colchón, con lo que esto implica en términos de seguridad. O peor aún, en un paraíso fiscal o en otro país. Pensemos en lo que pasó hace poco en Chipre".
"La idea es transformar estos ahorros en nuevas inversiones, que significa incorporar esos recursos ociosos en el sistema productivo, para que, a su vez, se traduzcan en nuevos empleos y más consumo, para que sigamos consolidando este modelo que beneficia a todos y no beneficia a un sector determinado", señaló el funcionario.
Además, remarcó que a lo largo de la historia "las devaluaciones han llevado a la desconfianza de nuestra moneda", por lo que la intención es volcar la masa de dinero ocioso hacia "el activo más seguro y más rentable, la inversión en bienes, en activos estratégicos, en construcción, en energía".
En este sentido, criticó a quienes "empujan a la gente a comprar dólares pregonando una fuerte devaluación", en acciones "asociadas a hechos y campañas políticas". Según Kicillof, "hay economístas que dicen que viene la debacle a la vuelta de la esquina y la realidad es que eso no ocurre".
De la rueda de prensa también participaron la titular del BCRA, Mercedes Marcó del Pont, el titular de la AFIP, Ricardo Echegaray, y el secretario de Comerico Interior, Guillermo Moreno.
En el caso de Del Pont, durante su ponencia puntualizó que con este nuevo bono "se va a generar un certificado de depósito en dólares", cuyo "objetivo es tomar parte de esos recursos ociosos en moneda extranjera trasformándolos en ahorro".
Asimismo, aclaró que "este certificado tendrá poder cancelatorio para obligaciones en dólares", así como que "va a ser nominativo, al portador, endosable" y que "su posibilidad de recupero, de cobro, va a estar asociado a una inversión en compra venta de vivienda, de lote, de construcción".
Para ello, Marcó del Pont señaló que "se va a entregar un certificado de depósito equivalente al depósito que se haga en la entidad financiera" y que "esos dólares van a estar en custodia del Banco Central".
Por su parte, Hernán Lorenzino afirmó que lo que se buscó es establecer "un instrumento que sea accesible para todas las personas con capacidad de ahorro", así como que "la idea es que todas las entidades financieras puedan suscribir este documento", para el cual se realizarán "nominaciones de 100, 1000 y diez mil dólares".
En el mismo sentido, el ministro agregó: "Queremos que todos los ahorristas tengan esta opción de invertir en estos títulos, que se complementan con el programa de exteriorización de activos en dólares".
Y puntualizó que "este bono va a tener vencimiento en el 2016, solo con dólares, que va a pagar el 4 por ciento de interés anual", además, que "los pagos de intereses se pagarán cada seis meses en dólares".
"Quienes quieran suscribir esto deberán depositar sus dólares, van a tener acreditados sos bonos", finalizó Lorenzino
En cuanto al blanqueo de divisas, el titular de la AFIP, Ricardo Echegaray, anunció el tercer título del proyecto de ley que será presentado en el Congreso, que consta de una “exteriorización voluntaria, que es declarar lo que no se tenía declarado”. Es decir, se trata de una amnistía fiscal que busca “incorporar al circuito formal fiscal lo que no estaba declarado”.
En este sentido, especificó quiénes pueden incorporarse a esta medida: “personas físicas y todas las personas jurídicas, aquellos que estén y aquellos que no estén inscriptos ante la AFIP (que deberán hacerlo a la hora de entrar en el blanqueo)”.
Están excluidos quienes quieran exteriorizar “divisas producto de lavados de activos y de financiamiento del terrorismo, querellados o imputados por lavado, narcotráfico y terrorismo, quienes están quebrados, los funcionarios públicos y sus familiares, en todos los niveles y de todos los poderes”.
Los plazos previstos por la iniciativa contemplan que el dinero se puede formalizar hasta “tres meses desde la promulgación de la ley o su publicación en el boletín oficial”.
Qué es lo que se puede exteriorizar: moneda extranjera y divisas que estén en el país o en el exterior al 30 de abril del 2013. Al respecto, Echegaray agregó que “se puede incluir el producido de la venta de bienes en el exterior, aunque siempre dentro de esos tres meses”.
Para esto, las divisas que estén en el país se deben depositar en un banco local, privado o público y, si están en el exterior, se pueden incorporar mediante transferencia bancaria.
El funcionario detalló que “el principal beneficio de la medida es que quedan eximidos de todos los impuestos, incluidos los del débito y crédito que deben hacerse para el depósito o transferencia en el banco local”.
En este sentido, enfatizó que “no hay vocación recaudatoria en esta medida” ya que quienes se incorporen “se sacan el peso de la carga tributaria por la que se generaron esas divisas” y agregó: “es invitar a incorporarse al circuito formal”.
Por último, subrayó que los contribuyentes que decidan adherirse a la exteriorización voluntaria “quedan eximidos de las sanciones previstas por el régimen penal cambiario y la ley penal tributaria”, es decir, "no pagan por los impuestos atrasados”.
“La gran oportunidad que les estamos dando es invertir en el desarrollo económico del país”, concluyó Echegaray.
No hay comentarios:
Publicar un comentario