Luego de su encuentro con el Papa, el Nobel de la Paz expresó: "Francisco dijo que hay que buscar verdad, justicia y reparación", con relación a la dictadura. Dijo que su principal preocupación al asumir era "la pobreza en el mundo", de ahí el nombre que eligió.
"Me expresó su preocupación por reducir los índices de pobreza en el mundo trabajando junto a los pobres. Por este motivo me contó que optó por llevar el nombre Francisco como guía para su papado", afirmó el Nobel de la Paz luego de la reunión con Francisco.
"Estábamos los dos muy emocionados por este reeencuentro. Lo que me pidió es que lo acompañemos con la oración, y le di mi compromiso de poder acompañarlo y trabajar para que su papado esté al servicio del pueblo de dios y de la humanidad", expresó Pérez Esquivel.
En artículos aparecidos en medios gráficos de Buenos Aires y declaraciones periodísticas, Pérez Esquivel fue uno de los primeros en rechazar las versiones que vinculan a Jorge Bergoglio con el accionar de la dictadura cívico-militar, incluso como "cómplice", tal y como sostiene el periodista Horacio Verbitsky, entre otros.
"A Bergoglio se le cuestiona porque se dice que no hizo lo necesario para sacar de la prisión a dos sacerdotes, siendo él el superior de la congregación de los Jesuitas. Pero yo sé personalmente que muchos obispos pedían a la junta militar la liberación de prisioneros y sacerdotes y no se les concedía", indicó Pérez Esquivel a BBC Mundo, a lo que agregó: "No hay ningún vínculo que lo relacione con la dictadura".
El activista por los derechos humanos también aventuró a medios italianos que "Francisco podrá tener un papel de intermediación entre Argentina y Reino Unido en la cuestión de las Islas Malvinas", en coincidencia con lo planteado por Cristina Fernández de Kirchner durante su reunión con el Papa, ocurrida el lunes.
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