Ante el decreto firmado por Mugrizio Macri para que hoy no haya clases en las escuelas públicas -en tl turno mañana-, se generó un fuerte debate. El ministro de Educación de la Nación expresó su desacuerdo. También se pronunciaron en contra desde el periodismo, la dirigencia política y organizaciones de derechos humanos.
El procesado jefe de gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Mugrizio Macri, decretó asueto para el turno mañana de todas las escuelas públicas y privadas para hoy, por la asunción de Jorge Bergoglio como Papa. La decisión generó rápidamente una fuerte polémica entre quienes avalan la medida y quienes consideran que el acto de mañana es una oportunidad para debatir en las escuelas.
“Respeto la intención de acompañar desde lo escolar la alegría de la sociedad ante la asunción del Papa. Pero creo que si están los chicos en la escuela, esto podría ser más impactante y significativo”, consideró el ministro de Educación de la Nación, Alberto Sileoni.
Desde la Asociación por los Derechos Civiles (ADC), le solicitaron al gobierno porteño que dé marcha atrás con la decisión. “La ADC considera que dicha decisión viola el principio de neutralidad religiosa del Estado y los derechos de todos los habitantes a la educación laica y a ser tratados igualitariamente, sin ningún tipo de discriminación por motivos religiosos”, expresaron en un comunicado.
Y agregaron: “El Estado está obligado a la neutralidad confesional en el marco de la educación pública obligatoria debiendo inculcar a los alumnos y alumnas un pensamiento neutral, garantizando, a todos por igual, la libertad de conciencia. (…) La decisión elimina las diferencias, que son condición de la comunidad plural, multicultural y diversa que integran los habitantes de la ciudad”.
Desde la oposición política al macrismo también levantaron la voz. La legisladora porteña Gabriela Cerruti (Nuevo Encuentro) afirmó en Twitter: “En un estado laico, con educación laica, seguir la ceremonia es una libre elección y no una obligación. Me parece re importante el momento de la asunción, aún no siendo católica. Obvio que voy a mirarlo. Que cada uno haga lo que quiera. #noalasueto”.
“No me gusta del comunicado lo de ‘argentinos de buena voluntad’. ¿Qué quiere decir? ¿Que los que no se alegraron son de mala voluntad? Yo no me siento interpelado especialmente por la asunción de este papa. Y no por eso soy un argentino de mala voluntad”, dijo por su parte Pablo Bergel, del bloque de Proyecto Sur.
El periodista Reynaldo Sietecase, también se mostró en desacuerdo con la medida macrista. “Me dicen que hay asueto escolar por la entronización del Papa. Es innecesario, viola la libertad religiosa y ni Francisco estaría de acuerdo”, tuiteó.
Desde la Confederación Argentina por un Estado Laico (CAEL) expresaron su preocupación. “La Ciudad, en particular su sistema educativo, manifiesta mediante esta norma su preferencia por un culto promoviendo la celebración de un rito del mismo por parte de quienes profesan otros cultos o ninguno”, advirtieron. El profesor e investigador de Derecho, Lucas Arrimada, cuestionó: “La mejor Constitución de Argentina es la de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y tiene el Poder Judicial con más altos salarios del país: Y no pueden contra un asueto. Vergüenza”.
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