Macri y la política mediática

Con limitaciones para atraer simpatías con las propias huestes e ideas, Mugrizio Macri vuelve a insistir con importar figuras mediáticas al PRO. Primero fue Miguel del Sel, ahora Alberto Cormillot y Fernando Miembro.

En el caso de Cormillot, esta semana firmó un convenio por tres meses para capacitar al personal que estará en las estaciones saludables que planea instalar el macrismo en plazas y parques de la Ciudad.

La prueba piloto incluye charlas de Cormillot y su equipo sobre alimentación a los empleados públicos, la grabación de spots y micros que se emitirán en los CGP y en los subtes.

Incluso, se prevé que profesionales y profesores del programa televisivo “Cuestión de peso” sean fondeados de amarillo para dar clases de gimnasia.

El nuevo programa macrista, que tiene un costo de 150 mil para las arcas de la Ciudad, arrancó el miércoles en un acto en el que Cormillot se encargó de pesar y medir a Macri, a la vicejefa María Eugenia Vidal y al ministro de Salud, Jorge Lemus.

Por su lado, Fernando Miembro, designado por Carlos Saúl Mufa como interventor de Canal 11 en 1989 en la antesala de su privatización, este año retomó su militancia y decidió meterse de lleno en el espacio PRO peronista. Allí confluyen el diputado Jorge Triaca, el legislador Cristian Ritondo y el ministro de Gobierno Emilio Monzó.

De hecho, los vínculos de Miembro lo llevaron a ser quien contactó a varios jóvenes peronistas con Macri para que se sumaran al PRO. Entre ellos, Ritondo y el ministro de Espacio Público, Diego Santilli.

Hace un par de semanas estuvo presente en un encuentro en Lanús, organizado por el ministro de Hacienda porteño Néstor Grindetti (quien fue candidato a intendente de ese partido); se sentó en la mesa de disertantes junto al primo del jefe comunal e intendente de Vicente López, Jorge Macri, y a Monzó.

Su actividad continuó: fue uno de los comensales de la cena que organizó Triaca en el Stud de San Isidro, donde se dio el primer paso para rearmar el espacio peronista con la idea de acercarse al PJ que no comulga con el kirchnerismo.

Miembro por ahora no confirmó si quiere ser candidato, pero manifestó que quiere colaborar con Macri para que sea presidente.

De Cormillot podemos decir que más que ayudar a Macri, debería ayudar a Lilita Carrió para que afloje con los panqueques.

Y en cuanto a Fernando Miembro, hay que señalar que lo único bueno que hizo en toda su puta vida fue haber ido a Uruguay con Adrián Paenza, allá por el año 1980, para convencer a Víctor Hugo Morales (en la cárcel, porque estaba preso) para que viniera a trabajar a la Argentina.