Macri y la tijera a la educación

Padres de alumnos de los a colegios estatales porteños han comenzado a juntar firmas contra la clausura de 221 grados que dispuso el Gobierno de la Ciudad. “No entran 40 chicos en un aula”, se quejaron.

Primero lo alertaron los docentes desde la UTE Capital. Ahora, son los padres de los alumnos de las escuelas públicas quienes comenzaron a accionar contra el cierre de 221 grados que dispuso el Gobierno de la Ciudad. Anunciaron que recolectarán firmas el sábado próximo en la esquina de Acoyte y Rivadavia para comunicarle su repudio al ministro de Educación porteño, Esteban Bullrich.

“Dicen que juntan grupos para mejorar la calidad educativa, pero no entran 40 chicos en un aula”, se quejaron los padres.

“Macri está planteando cerrar 143 cursos que es el equivalente a cerrar 10 escuelas públicas”, graficó uno de los padres de la Escuela de Recuperación Nº 8 "Luis Vernet", que funciona en el barrio de Parque Chacabuco y proporciona educación a chicos con diferentes discapacidades como ceguera o problemas motrices.

Según anunció la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE), la Dirección General de Educación Estatal de la Ciudad firmó una disposición que cierra 143 grados en escuelas primarias, 53 cursos en el nivel medio y otros 25 en establecimientos técnicos. Los distritos escolares afectados serían el 2º, 3º, 6º, 7º, 8º, 9º, 10º, 12º, 15º y 18º.

Los padres aseguraron que el argumento oficial es que "van a juntar grupos para mejorar la calidad de la educación" y se quejaron porque van a aglutinar a los estudiantes en salones reducidos. "Las aulas tienen un espacio de seis por seis y no pueden meter 40 chicos ahí", ilustraron.

Por todo esto, se reunirán el sábado próximo en la clásica esquina de Acoyte y Rivadavia para reunir firmas en repudio a la medida.

Por el mismo motivo, los docentes marcharán hoy a las 18 junto a padres y estudiantes a la cartera educativa comunal, ubicada en Paseo Colón 255. Según ellos, el macrismo cerrará cursos y grados en los niveles primario y secundario por supuesta falta de alumnos, aunque todavía no finalizó la inscripción 2012.

El desprecio de Macri por la educación pública va en aumento. Peri, sin embargo, para los grandes medios -con Clarín a la cabeza- el problema más grave de la educación, sigue siendo el malestar de los docentes con Cristina, por haber dicho que trabajaban 9 meses y tenían tres de vacaciones.