El previsible discurso PRO

Ante cada contingencia, el macrismo unifica su discurso en torno al libreto elaborado por Durán Barba y su equipo de marketing, y todos sus hombres y mujeres utilizan argumentos similares. Los ejemplos de Michetti y Montenegro y las falacias de la nueva estrategia.

El PRO y sobre todo su líder, Mugrizio Macri, se quejan de algo así como la "politización de la política". Resulta insólito verlo escrito, pero es habitual escuchar a dirigentes del PRO quejarse por la "politización" de un conflicto o, por ejemplo, del traspaso de los subtes. Se trata, en todos los casos, de problemas políticos, el PRO es un partido político y se dedican a la política. Parece innecesario aclararlo, pero para el PRO, quizás sea un dato imprescindible.

En esta ocasión, la diputada Gabriela Michetti se quejó del traspaso de los subtes y apunto, por supuesto, contra el Gobierno Nacional. Sucede que la Presidenta envió al Congreso un proyecto de ley para que el Gobierno de la Ciudad se haga cargo de los transportes públicos del distrito, tal como el propio Macri y la misma Michetti habían pedido en reiteradas ocasiones antes de darse cuenta de que realmente deberían gestionar y que no sería sencillo.

Michetti acusó al Gobierno Nacional de "reeditar el viejo conflicto de los argentinos entre unitarios y federales". Su explicación es la siguiente: "Intentan hacer algo que es muy perjudicial para la gente; están tratando de reeditar ese viejo conflicto de los argentinos de unitarios y federales, poniendo a la Ciudad como si quisiera un proyecto para jorobar a las provincias".

Pero lo cierto es que la Ciudad pide el traspaso del Subte, y de la Policía "con los recursos". Esto implica que las provincias financien al distrito más rico de Argentina; para verlo más claro, los habitantes de las provincias más pobres, financiarían el transporte y la seguridad de las personas que viven, por ejemplo, en Barrio Parque.

Esto es lo que pretende el macrismo, espacio que en campaña aseguraba que con gestionar bien los recursos de la Ciudad, alcanzaba para todo. Sin embargo, ahora que el hijo bobo de Franco Macri ostenta el cargo de Jefe de Gobierno, no se puede.

"Es un juego político berreta y de mala calidad que no tiene nada que ver con los problemas de la gente", agregó Michetti que ignora que sí se trata de problemas de "la gente". Que las provincias más pobres deban financiar al distrito más rico, repercute en "la gente" aunque Michetti lo ignore.

No se trata de enfrentar a la Ciudad con el interior del país, sino que cada distrito se haga cargo de sus servicios, algo que todas las provincias realizan sin quejas. La visión "porteñocéntrica" del infeliz de Macri y del PRO les impide observar la injusticia de que la situación actual se extienda en el tiempo.

Se trata de asumir responsabilidades, algo que parece complejo en el universo PRO, como así también de hacerse cargo de la gestión del transporte urbano que recorre el distrito. Ni más ni menos que gestionar la Ciudad en la que ostentan el Gobierno desde hace casi 5 años.

En sintonía con Michetti opinó Montenegro, el Ministro de Seguridad, quien aseguró que el kirchnerismo "pretende un país unitario"; sin embargo debería saber que cuando un proyecto de ley es tratado por el Congreso, representantes de todas las provincias abordan el tema y votan, en ejercicio de la democracia. Si el Congreso Nacional, integrado por representantes de las provincias, decide el traspaso de la gestión del transporte a la órbita del Gobierno de la Ciudad, se trata de una decisión federal en la que intervinieron todas las provincias.

La comunión discursiva del PRO es impulsada por Jaime Durán Barba, el principal asesor del partido político que lidera Mugrizio Macri. Por estos días se escuchará una y otra vez, el argumento de la pelea entre unitarios y federales. Alcanzará sólo con ver los medios del Grupo Clarín, voceros del macrismo.

En Currín On Line no terminamos de dilucidar qué es lo que más nos molesta; si el discurso del PRO en sí mismo, o si que casi todos sus integrantes transmitan ese discurso hablando como si tuvieran una papa en la boca. Porque "na gordo; tipo que la gente como uno habla así, ¿viste?"