Los cambios en 6-7-8

Desde principios de año, el popular programa de La TV Pública ha venido sumando nuevos panelistas a su mesa. Ya se han incorporado Dante Palma, Cynthia García y Edgardo Mocca y en marzo ingresará Mariana Moyano. 

Iniciada su cuarta temporada, 6-7-8  incorpora nuevos panelistas a su mesa. Durante las primeras emisiones de 2012, ya se han incorporado: Dante Palma, profesor de Filosofía y doctor en Ciencia Política, columnista de la revista Veintitrés; Cynthia García, periodista y columnista de La Mañana, el programa conducido por Víctor Hugo Morales en Radio Continental; y desde esta semana, Edgardo Mocca, politólogo y profesor en la Universidad de Buenos Aires. Desde marzo, Mariana Moyano, especialista en comunicación y docente de la UBA, completará el equipo.

Una vez finalizadas las vacaciones de todos los integrantes del panel, el ciclo rotará en sus seis emisiones semanales con distintas mesas manteniendo siempre constante el modelo de un conductor (Luciano Galende, Carlos Barragán), más cuatro panelistas e invitados. “Cada equipo estará  tres veces por semana”, detalla Fernando Agejas, productor ejecutivo del programa, quien además soastuvo el siguiente diálogo con nuestros amigos de Tiempo Argentino:

–¿Cuál es el aporte de cada uno de los nuevos integrantes?

–Dante Palma le puede dar un vuelo un poco más filosófico, analizar lo simbólico de los discursos, ayudarnos a decodificar los mensajes que estamos analizando, ayudar a poner las cosas en un debido contexto; además es una persona de estar muy actualizada de leer los medios y la política, desde ese lado ayudará a contextualizar los discursos que el programa analiza día a día.

–¿Y en el caso de Cynthia García y Edgardo Mocca?

–A Cynthia la escuchábamos mucho en la producción para armar los informes. La convocamos por cómo explica las cosas en el programa de Víctor Hugo. Ella lee bien la realidad, es una persona que tiene data dura, que es contundente, que explica las cosas claramente. Mocca nos puede ayudar a analizar más las cosas que pasan desde un costado político, comprender las alianzas que se forman en determinados momentos: ¿Por qué tal político cambia ideológicamente de repente? ¿Por qué el discurso va virando? Su aporte es más desde la parte política, él analiza desde un costado de análisis propio y no tanto de información.

–¿Mariana Moyano?

–Nos encanta lo que hace en el noticiero de Canal 7, analizando medios. Cuando vino al programa lo hizo muy bien, colaborará mucho en ese sentido de explicar por qué se titula de una u otra manera. Y los roles del equipo fijo continuaran igual que hasta ahora.

–Como productor, ¿qué aprendiste en estos cuatro años de programa? ¿Cuál era la idea al nacer 6-7-8 y cuál es la realidad hoy?

–La idea original es y sigue siendo el análisis de medios, con el correr del tiempo el programa se fue metiendo más en el terreno político pero siempre tratando cómo los medios tocan diversos temas, en general, referidos a la política.

–En el 2008 no estaba la Ley de Medios, no se discutía el tema de Papel Prensa, ni se analizaban abiertamente los intereses de cada medio.

–Eso fue lo revolucionario de 6-7-8. Nunca, al menos no de una manera tan cruda, se había  puesto en pantalla los intereses que tienen algunos medios concentrados para decir lo que dicen. Nunca se había hecho de una manera tan directa. En ese contexto, creo que todos aprendimos un poco a analizar los medios con más desconfianza. Desde 6-7-8, más allá de analizar cómo los medios presentan las noticias, uno se fue acostumbrando y aprendiendo a no aceptar un titular o un flash informativo de un noticiero o de una radio como la verdad revelada. También podríamos decir que no hay una sola verdad, hay infinitas verdades, pero ¿por qué los medios hegemónicos siempre muestran la misma verdad disfrazada de la verdad general? Esa fue una gimnasia que día a día fui practicando.

Finalmente, Agejas hizo hincapié en que los cambios buscan mejorar la calidad del programa en beneficio de los televidentes y desmintió de manera terminante que el objetivo sea ganar el premio Clarín en 2012.