El dirigente Roberto Digón, integrante de la lista oficialista "Frente Unidad Boquense", acusó al jefe de gobierno porteño, Mauricio Macri, de usar el poder "para influir en las elecciones de Boca Juniors".
En esa línea, el ex vicepresidente del club "xeneize" le dijo a Télam que la clausura del estadio Nuevo Gasómetro y la consecuente suspensión del partido San Lorenzo-Tigre fue "una chicana" del macrismo para evitar que Boca se consagrara campeón antes de los comicios previstos para mañana."Esto demuestra la soberbia del jefe de gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, que se cree el dueño de todo", aseguró Digón, quien será futuro vice segundo del club en caso que Jorge Ameal renueve su mandato.
San Lorenzo-Tigre, que podía definir el título del Apertura en caso que el conjunto de Victoria dejara algún punto en el camino, fue suspendido por la clausura del Nuevo Gasómetro, determinada esta mañana por el gobierno porteño.
La Asociación del Fútbol Argentino (AFA) calificó hoy de "sorpresiva y unilateral" esa decisión que impidió la disputa del partido, con la programación confirmada y el operativo policial garantizado.
Vamos a explicar un poco cómo son las cosas para aquellos que no entienden de fútbol.
Hoy hay elecciones en Boca y uno de los candidatos, Daniel Angellici, es el delfín de Macri y compite contra el actual presidente, Jorge Amor Ameal.
El partido San Lorenzo - Tigre estaba programado para ayer a la tarde y si en ese partido Tigre perdía o empataba, Boca se consagraba campeón automáticamente, sin jugar. Esto significa que hoy las elecciones se hubieran llevado a cabo con un Boca ya campeón, lo cual, se supone, hubiera favorecido a Ameal.
Por eso Mugricio Macri apeló a la chicana de lo que se llama "no dar puerta". En todos los partidos que se disputan en estadios de la CABA, un grupo de inspectores del gobierno de la ciudad concurren el mismo día del partido, varias horas antes del inicio, para corroborar que todo esté en orden y así 'dar puerta' que significa autorizar que se abran las puertas del estadio.
Lo curioso es que "el dar puerta" o "no dar puerta" depende de lo que los inspectores constaten "in situ" en el estadio algunas horas antes del partido y, en este caso, los que estamos un poco metidos en el ambiente del fútbol, sabíamos desde el viernes que no iban a dar puerta. Hay que mencionar además, que es la primera vez que los inspectores deciden "no dar puerta".
A riesgo de ser repetitivos, volveremos sobre una reflaxión que hacíamos días pasados. Si el hijo de bobo de Franco Macri usara el poder para lo que debiera y si los inspectores se dedicaran a inspeccionar como corresponde, Isidoro Madueña hoy estaría vivo, en lugar da haber muerto bajo los escombros en el derrumbe del edificio de la calle Bartolomé Mitre.
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