El jefe comunal, Mugricio Macri, calificó de "absurda" a la huelga dispuesta por los gremios en rechazo a la modificación del Estatuto Docente. Por su parte, Esteban Bullrich confirmó que les descontarán los días de protesta y que se recuperarán las jornadas de clase a fin de año.
El macrismo pretende modificar el Estatuto Docente en la Ciudad de Buenos Aires y con ello el sistema de selección, designación y ascenso de los maestros dentro de las escuelas. Contra este proyecto, los trabajadores de la educación cumplieron ayer la primera de dos jornadas de paro. Ante la huelga, el Gobierno de la Ciudad salió ayer a la mañana con los tapones de punta a criticar a los gremios docentes por la medida de fuerza. El hijo bobo de Franco Macri la calificó de “absurda” y dijo que “no se entiende”.
Por su lado, el ministro de Educación porteño, Esteban Bullrich, enmarcó al paro en una "cuestión política contra el gobierno de Macri" y criticó la medida de protesta al señalar que "es absolutamente injustificado dejar a 350 mil chicos sin clase para presionar".
Según el funcionario, son los docentes quienes no quieren el diálogo en la Legislatura sobre la iniciativa oficialista que busca eliminar las Juntas de Clasificación y reemplazarlas por la Oficina Única.
Sobre el proyecto, Bullrich aseguró que sólo se modificarían algunos puntos del Estatuto del Docente y sostuvo que los cambios tienen que ver con una actualización tecnológica. "Lo que hoy hacen docentes (de las juntas) leyendo papeles lo va a hacer una computadora: recupero para las aulas del sistema educativo 300 docentes que hoy leen papeles", explicó.
Tanto el jefe comunal como el titular de Educación coincidieron en que el PRO descontará los días de huelga a los educadores que se sumen al paro y añadirá jornadas de clase a fin de año para recuperar las perdidas por la medida de fuerza.
Por el lado de los docentes, la secretaria general de la Confederación de Trabajadores de la Educación de la República Argentina (CTERA), Stella Maldonado, sostuvo en diálogo con Radio América que "la decisión de realizar el paro es unánime" y dijo que "las Juntas de Clasificación son el único órgano que organiza democráticamente los ascensos”.
Además, afirmó que "la amenaza de descontar los días de huelga es un intento de desmovilizar a los que luchan" porque "siempre, tras un conflicto, se negocia luego el descuento que la patronal hace de los días no trabajados".
"El paro se hace para defender la calidad de la educación pública porque si a los docentes los designan por ser amigos del gobierno de turno los que pierden son los alumnos" y remarcó que "los docentes tienen que ascender por su capacidad profesional".
En tanto, el titular del gremio UTE-CETERA, Eduardo López, señaló ayer que, en la primera jornada del paro, "el acatamiento fue de un 98%, a pesar de la amenza de descontar los días".
Macri dijo que la medida "no se entiende". ¿Alguna vez entendió algo de política el jefe de Gobierno?
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