A todo chancho le llega su San Martín, según un dicho popular. Esta vez, le llegó al gobernador de Santa Fe y candidato del FAP, a quien su vice radical lo cuestiona con dureza. En el PS le piden la renuncia.
Algunos funcionarios del gobierno santafesino, siempre moderados, piden que "se rectifique". Mientras tanto, dirigentes del PS de Santa Fe, un poco más cabreros, reclaman directamente que "si no le gusta, que renuncie".
Lo cierto es que la declaración de esta semana del radicalismo santafesino, que lleva también la firma de la actual vicegobernadora, Griselda Tessio, provocó revuelo en el que aparecía como sólido gobierno de Hermes Binner.
"El siglo 21 es del socialismo; los otros partidos son del siglo pasado", había dicho el gobernador, lo que causó malestar y la inmediata reacción de los radicales que en Santa Fe acompañan el Frente Progresista, incluída su vicegobernadora, la radical Tessio, a quien muchos ya califican como "la Cobos santafesina".
Sucede que, para los radicales, las palabras de Binner significaron "un descrédito y ofensivas, no sólo para el radicalismo sino también para el PDP, la Coalición Cívica y los otros partidos", además de mostrar "una visión hegemónica del sector que preside (Binner) en relación al Frente Progresista y una postura paternalista y desmerecedora del resto de las fuerzas que lo componen".
Lo cierto es que con el ninguneo de Binner en Santa Fe y la diáspora en Mendoza, donde el candidato a gobernador radical llama a cortar boleta para no hundirse electoralmente con la candidatura presidencial de Alfonsinito, la UCR y su frente parecen prontos a pasar a mejor vida, incluso antes que llegue octubre.
Cuando gobiernan solos, son impresentables. Cuando gobiernan con alianzas, son impresentables y traidores. Triste destino de la UCR.
Lo cierto es que la declaración de esta semana del radicalismo santafesino, que lleva también la firma de la actual vicegobernadora, Griselda Tessio, provocó revuelo en el que aparecía como sólido gobierno de Hermes Binner.
"El siglo 21 es del socialismo; los otros partidos son del siglo pasado", había dicho el gobernador, lo que causó malestar y la inmediata reacción de los radicales que en Santa Fe acompañan el Frente Progresista, incluída su vicegobernadora, la radical Tessio, a quien muchos ya califican como "la Cobos santafesina".
Sucede que, para los radicales, las palabras de Binner significaron "un descrédito y ofensivas, no sólo para el radicalismo sino también para el PDP, la Coalición Cívica y los otros partidos", además de mostrar "una visión hegemónica del sector que preside (Binner) en relación al Frente Progresista y una postura paternalista y desmerecedora del resto de las fuerzas que lo componen".
Lo cierto es que con el ninguneo de Binner en Santa Fe y la diáspora en Mendoza, donde el candidato a gobernador radical llama a cortar boleta para no hundirse electoralmente con la candidatura presidencial de Alfonsinito, la UCR y su frente parecen prontos a pasar a mejor vida, incluso antes que llegue octubre.
Cuando gobiernan solos, son impresentables. Cuando gobiernan con alianzas, son impresentables y traidores. Triste destino de la UCR.
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