El Senado de la Nación aprobó ayer la designación del senador por Santiago del Estero Gerardo Zamora como presidente provisional de la Cámara alta por 57 votos afirmativos contra 12 negativos.
El vicepresidente Amado Boudou, que presidió la sesión preparatoria, tomó juramento en su cargo al ex gobernador de Santiago del Estero, de origen radical, inmediatamente después de aprobado su nombramiento.
La designación, propuesta formalmente por el jefe del bloque de senadores del oficialismo, Miguel Pichetto, recibió el apoyo de los bloques del FPV, del FAP, el PRO, el Movimiento Popular Neuquino y del peronismo federal pero no el del bloque de la UCR, que lo cuestionó duramente.
En el inicio de la sesión, Pichetto fundamentó el apoyo de su bloque a Zamora en el hecho de que se trata de "un hombre de trayectoria que ha venido acompañado en los últimos diez años las políticas del gobierno nacional con total libertad y solidaridad" y aseguró que se lo considera "un hombre de nuestra propuesta política".
"Los cargos que están en la línea sucesoria tienen que ver con una decisión de la Presidenta y como siempre hemos hecho en este bloque hemos aprobado y fortalecido las decisiones presidenciales", enfatizó.
El jefe de los senadores kirchneristas agradeció también la labor cumplida por la senadora tucumana Beatriz Rojkés de Alperovich, quien ha sido presidenta provisional del Senado en el último año y que, según manifestó, "ha acompañado con lealtad y solidaridad la gestión de la Presidenta de la Nación".
Sobre Zamora, Pichetto agregó además que "tiene una trayectoria como gobernador de dos períodos consecutivos en lo que significa también su aporte en construcción de mayoría en ambas cámaras".
Las explicaciones que dio Pichetto en la cámara estaban en sintonía con las que había dado por la mañana el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, quien en su habitual rueda de prensa sostuvo que se trata de una "decisión estratégica de la Presidenta, que propicia una integración amplia, plural y democrática del Frente para la Victoria".
En la Casa Rosada, Capitanich indicó además que si bien Zamora es "alguien que no procede de las filas del peronismo", mostró "compromiso y adscripción" al proyecto del Frente para la Victoria, que demuestra que "desde la pluralidad de ideas se pueden construir reglas de calidad política e institucional".
Durante la sesión preparatoria de ayer el radicalismo votó en contra de la decisión de que Zamora ocupe la presidencia provisional, con excepción del senador por Catamarca, del Frente Cívico y Social, Oscar Castillo, quien acompañó la decisión del oficialismo.
El jefe del bloque de los senadores radicales, Gerardo "ladrillo" Morales, justificó el rechazo de su espacio a la designación de Zamora al señalar que se trata de "una actitud indigna y antiética que no se puede convalidar" por haber sido Zamora un hombre del radicalismo.
Morales declaró que respetan la decisión del gobierno nacional de elegir quién estará en la línea de la sucesión presidencial como es tradición pero advirtió que esta resolución "impacta" y representa "un agravio" a su partido.
En representación del nuevo interbloque FAP-UNEN-ARI, Rubén Giustiniani explicó que su bloque "ratifica la tradición parlamentaria que hace a la necesidad de la calidad institucional".
Tras el nombramiento de Zamora, el Senado ratificó también al radical Juan Carlos Marino como vicepresidente de la Cámara; al cordobés Luis Juez (FAP) como vicepresidente primero del Senado y al salteño Juan Carlos Romero (Peronismo Federal) como vicepresidente segundo.
La cámara también avaló por unanimidad la ratificación de Juan Estrada como secretario parlamentario; de Juan Zavaleta como secretario administrativo, de Luis Borsani como prosecretario parlamentario, de Mario Daniele, como prosecretario administrativo y de José Lepere como prosecretario de coordinación operativo en lugar de Santiago Rébora.